BBVA-Sabadell: No digas trigo...

BarcelonaHay un dicho que encaja muy bien con la opa del BBVA en el Banc Sabadell: no digas trigo hasta que esté en el saco y bien atado. La opa, un proceso que lleva ya más de dieciséis meses, demuestra que las cosas pueden vivir giros de guión y primero ir bien para unos y mal para otros, y viceversa. En BBVA no se cansaron de decir que no mejorarían su oferta. Es evidente que esto se hace, pero no se dice. Pero es raro insistir tanto cuando se piensa hacer lo contrario de lo que se asegura. Esto a menos que el cambio se deba a la presión de los mercados, que llevaban meses apostando por lo que se ha acabado haciendo, aunque, según algunos inversores, con una mejora insuficiente.

En todo caso, con la modificación de la oferta el BBVA corrige una cuestión (errada, dicen algunos) que penalizaba fiscalmente a los pequeños accionistas. Ahora no tendrán que liquidar el IRPF si tienen plusvalías siempre que el BBVA supere el umbral del 50,01% de capital que se autoimpuso. En función de cómo vayan las adhesiones de los accionistas, puede optar por renunciar y conformarse con entre el 30% y el 49,99%, que le obligaría a lanzar una segunda opa en efectivo, pero impediría que ningún otro potencial comprador lanzara una oferta. Y más adelante (quizás con un cambio en el gobierno español) podrían acabar encabezando una fusión. Ya veremos.