Libros atrevidos
En los últimos días he podido hojear dos libros recién editados que me han parecido espectaculares. Por un lado, el ensayo de Elvira Prado-Fabregat Naturaleza oscura. Imaginación y ecología a partir de 'Solitud', publicado por la editorial Barcino. Y por otro, la Guía de las criaturas fantásticas catalanas que ha publicado Comanegra, con textos de Joan de Déu Prats e ilustraciones de Maria Padilla Climent.
Son dos libros singulares, arriesgados, muy bonitos y ambos fruto de un trabajo –trabajo– tenaz y riguroso. Les deseo la mejor suerte del mundo y se los recomiendo con un gran convencimiento, pero no sé si llegaremos a verlos en las listas de los más vendidos. Y, sin embargo, ¡qué gran privilegio que se hayan publicado y que los podamos encontrar en las librerías!
Que esto haya sido posible se debe a la valentía y la tozudez de los autores y también de sus respectivos editores. Por eso, antes de hablaros un poco de los libros, quería destacar lo agradecidos que debemos estar de tener personas como ellos en la cultura catalana: tozudas, rigurosas, valientes, tenaces. La vitalidad del sector editorial, además de medirse por miles de libros vendidos, también debe evaluarse por la aparición de libros como éstos.
El ensayo de Elvira Prado-Fabregat analiza el papel de la naturaleza en la obra maestra de Víctor Català. En una primera cata me he ido de cabeza a los capítulos que estudian la relación entre la literatura de la autora –que vivía retirada, la mayor parte del tiempo, en L'Escala– y las mejores y más representativas obras de la literatura gótica británica, como las hermanas Brontë o Mary Shelley. El ensayista, de hecho, explica que una de las chispas que inspiraron el ensayo fue la conexión que detectó entre Cumbres borrascosas de Emily Brontë y Soledad. Por cierto, la autora señala que esta relación es aún más increíble si tenemos en cuenta que Caterina Albert aseguró en una carta a Joan Maragall que no había leído ninguna obra de la literatura inglesa. Pero ya se sabe que a Víctor le gustaba hacer creer una cosa por otra... Maravilloso el capítulo que Naturaleza oscura dedica al viento (la tramontana) en la obra de Víctor Català y en los paisajes baldíos y lóbrecos de Cumbres borrascosas.
También resulta muy interesante el redescubrimiento de María de Bell-lloc, seudónimo de María del Pilar Maspons, autora de dos volúmenes de leyendas en los años 1875 y 1881.
En la Guía de las criaturas fantásticas catalanas descubrimos (o reencontramos) hasta ciento cincuenta ejemplares clasificados por su origen, poderes, aspecto. Sólo con los nombres propios de estas criaturas ya hay para mojar pan: bubotas, mujeres de agua, gusarapa, momerota, peladitos, tumbosales, gandofia, barrumbos y chirimelas. Hay algunos que le resultarán familiares (las brujas de Llers, en mi caso), pero seguro que hará grandes descubrimientos.
Las ilustraciones que acompañan a cada una de las fichas convierten el libro en una pieza preciosa y, por cierto, en un regalo navideño original. También será de gran ayuda a quienes tienen niños que esperan cada noche un cuento divertido y diferente.
La enhorabuena a quienes lo han hecho posible. Y a todos nosotros también.
