"Ha costado encontrar gente": el vía crucis de Jordi Domingo para hacer gobierno en el Consejo de la República
La entidad presentará al nuevo ejecutivo el 17 de mayo, tres meses después de las elecciones
Barcelona"En los próximos días tengo la intención de anunciar a los miembros de mi gobierno. Serán seis personas libres e independientes, de prestigio internacional, con una hoja de servicios incuestionable y comprometidas con nuestro objetivo". Esto decía el nuevo presidente del Consejo de la República, Jordi Domingo, en la última carta que envió a los registrados en esta entidad el 17 de marzo. Un mes después, la entidad sigue sin tener gobierno, aunque Domingo fue escogido en febrero, un mes antes.
La demora en la elección del nuevo ejecutivo contrasta con la rapidez con la que su predecesor, Carles Puigdemont, escogió al ejecutivo del ente. Tras ganar las elecciones el 19 de febrero del 2024, y que la sindicatura le proclamara presidente cinco días después, Puigdemont constituyó el gobierno el 1 de marzo. El nuevo ejecutivo no verá la luz hasta el 17 de mayo, aunque en principio quería anunciarse el 10. Aquel día, sin embargo, se celebra la convención municipalista de Junts y lleno del ANC.
Pero, ¿por qué se ha tardado tanto en constituirse? En conversación con el ARA, Domingo admite que era consciente de las dificultades que tendría para formar un equipo y que no todo el mundo con quien ha hablado se ha querido añadir al proyecto: "Configurar el gobierno ha costado; menos de lo que la gente se imagina, pero ha habido mucha gente que ha dicho que no por falta de tiempo o incluso por problemas de salud, y otros que han de Consejo". De hecho, reconoce que quería constituir el nuevo gobierno del Consell a principios de abril, tal y como anunció a los registrados, pero dice que tuvieron "más problemas de los previstos" y que era "justo y precipitado".
La crisis interna de la entidad –que se disolvió en una junta gestora hace unos meses y que convocó elecciones ante los distintos escándalos en la gestión de los recursos económicos que había hecho Toni Comín como vicepresidente– no lo ha puesto fácil: "Sabía que hacer un gobierno con las actuales circunstancias sería difícil porque hay que recuperar el prestigio de la misma. Sea como fuere, Domingo minimiza el portazo de quienes no se han sumado: "No me planteé unas personas concretas, sino un abanico amplio".
Equipo cerrado de seis personas
Sin embargo, Domingo revela que, ahora sí, ya ha cerrado la nueva ejecutiva, que será de seis personas (con Puigdemont eran diez), aunque todavía podría ampliarse con más miembros estos últimos días. "Estoy muy contento de que hayan dado el paso porque este primer núcleo es gente reconocida a nivel nacional e internacional". Sin querer avanzar ningún nombre, confirma, tal y como se comprometió en campaña, que no hay cargos orgánicos de ningún partido, pero sí gente que ha estado vinculada, y otros que no. "Es un gobierno muy transversal; he aplicado el criterio del 1-O cuando no nos preguntábamos si éste era de un partido u otro. Hay un poco de todo", asegura.
Sin embargo, el nuevo presidente del Consell saca hierro a la demora: "No hemos tardado tanto. No tomé posesión hasta unos días y la junta gestora no me hizo el traspaso hasta la primera quincena de marzo, y han ido pasando las semanas". También subraya que primero necesitaba conocer a la asociación. "Hemos ordenado la casa y analizado cuál es la situación; nos hemos reunido con los consejos locales y todavía tenemos pendientes, y con entidades y partidos, y todo quiere tiempo".
No lo ve de la misma manera REVOLUCIONÉMOSNOS, la candidatura que quedó en segunda posición en las elecciones. Esta candidatura, ahora reconvertida en corriente crítica, que da voz a los consejos locales menos oficialistas, denuncia el desgobierno: "Jordi Domingo no tiene, dos meses después de ser proclamado, el gobierno de alto prestigio internacional que prometió". En un comunicado muy contundente, el movimiento reclama incluso que dé un paso al lado para no llevar a la entidad a la "desaparición": "Quizá antes de decir que quiere hacer mayor al Consell, debería considerar, humildemente, la posibilidad de que el Consell se le está haciendo mayor a él".
