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La dirección de ERC busca la paz interna en Barcelona y Lleida

Ha iniciado procesos de conciliación para integrar las candidaturas que se enfrentaron en primarias

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El líder de Esquerra, Oriol Junqueras, en una rueda de prensa en la sede del partido.

BarcelonaUn mes después de que se celebraran las primarias en los dos únicos territorios, Barcelona y Lleida, donde se presentó más de una candidatura, ERC empezó el proceso para intentar instaurar la paz interna. Los estatutos de la formación establecen que en los casos en los que la candidatura ganadora no supera el 55% de los votos, la dirección nacional debe abrir un proceso de "diálogo" para conseguir "una fusión de candidaturas". Tanto en Barcelona como en Lleida ocurrió exactamente eso y los dos candidatos ganadores se impusieron por un ajustado margen: Eva Baró, en la capital catalana, por 23 votos, y Carles Comes, en Lleida, por 8 votos. Las reuniones, según fuentes consultadas, han comenzado ya en Barcelona, pero en estos momentos no hay ningún acuerdo. En la federación leridana, se iniciarán la próxima semana.

El objetivo es evitar la fractura en el territorio y mantener el partido cohesionado en un momento en que hay dos citas marcadas en el calendario: las elecciones europeas del mes de junio y las catalanas previstas para febrero de 2025. De hecho, el proceso de conciliación iniciado en Barcelona es especialmente relevante si tenemos en cuenta que las primarias supusieron un pulso al junquerismo y que la candidatura oficialista, Eva Baró, superó por un estrecho margen. Hace cuatro años, la dirección había elegido a un candidato de consenso, Gerard Gómez del Moral, para evitar un enfrentamiento entre familias. Esta vez, sin embargo, dejó que Baró y Patrícia Gomà se enfrentaran en un proceso de primarias que fue tenso.

A estas alturas, la propuesta que la candidatura de Gomà asegura tener sobre la mesa es que cuatro miembros de su lista se incorporen a la ejecutiva, pero lo consideran "insuficiente". Gomà defiende que los resultados fueron suficientemente igualados para ampliar su representación y pide "generosidad". Por otro lado, también pide "impulsar" una ponencia política. Fuentes de la candidatura de Baró remarcan su voluntad de diálogo para explorar todas las fórmulas posibles de integración para que todo el mundo "se sienta partícipe". Ambas partes han mantenido encuentros con la dirección nacional pero también conjuntas. Fuentes de la cúpula de la calle Calàbria defienden que la idea es "aprovechar todo el potencial de la organización" porque "todo el mundo puede aportar políticamente".

El proceso en Lleida

En Lleida ganó el candidato que no era considerado oficialista. Carles Comes ha vuelto a tomar las riendas del partido después de que fuera ocho años presidente de esta federación regional. Comes, alcalde de Torrelameu, está dispuesto a integrar a cuatro personas de las dos listas que quedaron por detrás y que encabezaban el exalcalde de Alcarràs Miquel Serra y el ex diputado en el Congreso Xavier Eritja. "El objetivo es que no haya heridas en el territorio", dice Comes. Ahora bien, Serra avisa de que están dispuestos a entrar en la ejecutiva siempre que puedan jugar un "papel decisivo". Recuerda, en ese sentido, que se quedaron a 8 votos de Comes. Sin embargo, el alcalde de Alcarràs, considerado el candidato oficialista, relativiza la importancia de la fusión y afirma que si no se llega a un acuerdo, "no pasa nada". Tanto en Barcelona como en Lleida, la dirección quiere intentar alcanzar un pacto en ambos territorios lo antes posible. Habrá que ver si todo llega a buen puerto.

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