El gobierno español deniega el tercer grado a Iñaki Urdangarin pero no tendrá que cumplir condena en la prisión
Podrá pasar un fin de semana al mes en casa y salir diariamente a hacer voluntariado
MadridEl ministerio del Interior ha denegado a Iñaki Urdangarin, cuñado del rey Felipe VI, el tercer grado penitenciario, si bien le ha flexibilizado las salidas de la prisión y, de hecho, le permitirá pasar lo que le queda de la condena en un centro de inserción social en Alcalá de Henares (Madrid). Urdangarin continuará disfrutando del 100.2, que le permite salir diariamente a hacer de voluntario al Hogar Don Orione, situado en Pozuelo de Alarcón. Además, puede pasar un fin de semana al mes en casa y no tendrá que volver a la prisión de mujeres de Brieva (Ávila), donde cumplía la condena de 5 años y diez meses por el caso Nóos desde junio de 2018.
No es la primera vez que Urdangarin aspiraba al régimen de semilibertad, gracias a la valoración positiva de la junta de tratamiento de la prisión de Brieva, que el 26 de noviembre planteó concederlo por unanimidad. Ya lo había hecho en julio y, a pesar de que Instituciones Penitenciarias del Estado también dictaminó en contra del tercer grado, un juez de vigilancia penitenciaria de Castilla y León avaló la semilibertad para el cuñado del rey. La Audiencia de Palma, sin embargo, la acabó denegando a finales de septiembre.
Ahora el procedimiento podría volver a repetirse si la defensa de Urdangarin recurre la denegación del tercer grado al juez de vigilancia penitenciaria. Su situación, sin embargo, cambiará de manera inmediata dejando la prisión e instalándose en un centro de inserción social más cerca de Madrid.