Los escándalos con la compra de mascarillas asedian al PP

Almeida defiende la actuación del Ayuntamiento: "Nos pudimos equivocar, pero lo único que queríamos era proteger a los que tenían que salir a la calle"

Isabel Díaz Ayuso y José Luis Martínez Almeida, en una imagen de archivo
08/04/2022
3 min

BarcelonaLa compra de mascarillas y material sanitario en Madrid durante la pandemia amenaza con convertirse en el primer gran problema que tendrá que afrontar el nuevo líder del PP, Alberto Núñez Feijóo. El juzgado de instrucción número 47 de Madrid ha admitido a trámite la querella presentada ayer por la Fiscalía Anticorrupción contra dos comisionistas que presuntamente estafaron al Ayuntamiento de Madrid, un caso que se suma a la investigación abierta sobre el hermano de la presidenta madrileña, Isabel Díaz-Ayuso. Una cosa une los dos casos: unas comisiones muy jugosas en un momento especialmente dramático para España.

Vayamos por partes. El miércoles la Fiscalía Anticorrupción presentó una querella contra Luis Ramón Medina Abascal, hijo del duque de Feria y de Naty Abascal, y Alberto Javier Luceño. Se les acusa de estafa y blanqueo de capitales por tres contratos por valor de 12 millones de dólares a la empresa Leno para adquirir mascarillas, test rápidos y guantes. Según la querella, los precios estaban hinchados debido a las comisiones que pretendían cobrar los querellados. De hecho, la comisión llegaba al 80% del precio en el caso de los guantes, al 71% en el de los tests y al 61% en el de las mascarillas. Cuando los productos llegaron a Madrid, resulta que eran de peor calidad y mucho más caros que los que se podían adquirir en el mercado de manera normal. La querella también explica que con la comisión cobrada, más de 6 millones de dólares, los denunciados se compraron coches de lujo (un Ferrari y un Lamborghini), una casa, un yate y objetos de lujo como por ejemplo un Rolex, con el objetivo de blanquear el dinero.

¿Y cómo contactaron estos dos comisionistas con el Ayuntamiento? Pues a través de un primo del alcalde, el abogado Carlos Martínez-Almeida, que les facilitó el correo de la persona que centralizaba las compras en aquel momento. La Fiscalía descarta que se haya producido un delito de tráfico de influencias por el mero hecho de pasar un correo; por lo tanto, en principio, el Ayuntamiento sería aquí una administración perjudicada. La Fiscalía ya informó de que había detectado que muchos empresarios habían conseguido grandes beneficios con la venta de material sanitario, pero esto no es delito en sí mismo. En el caso de Luis Medina y Alberto Javier Luceño, sin embargo, se considera que engañaron al Ayuntamiento tanto con los precios como con la calidad de los productos. El juez instructor ha anunciado hoy que citará a declarar a los dos querellados y a otros testigos que pueda considerar de interés.

El alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, ha comparecido hoy para defender la actuación del Ayuntamiento: "Nos pudimos equivocar, pero lo único que queríamos era proteger a los que tenían que salir a la calle". Almeida se ha mostrado indignado por el hecho de que se pida su dimisión cuando la Fiscalía ha descartado que tenga cualquier responsabilidad en el caso. "Yo no tenía ni idea de que mi primo hubiera intervenido de alguna manera", ha explicado el alcalde, que ha relatado que Luis Medina envió dos correos al buzón del Ayuntamiento que centralizaba las compras de material, y que fue entonces cuando se pusieron en contacto con él para realizar las compras. "Evidentemente, si se demuestra que hemos sido estafados ejerceremos todas las acciones para recuperar hasta el último céntimo", ha dicho.

Choque con la Fiscalía Europea

Por otro lado, la Fiscalía continúa investigando el caso del hermano de la presidenta madrileña para intentar aclarar si en los cerca de 300.000 euros que cobró en comisiones por contratos con una empresa que vendía mascarillas a la Comunidad de Madrid hubo algún tipo de irregularidad. Esta investigación ha provocado un choque con la Fiscalía Europea, un órgano de creación reciente que investiga posibles casos de fraude con fondos europeos, y que considera que el caso Ayuso entraría dentro de sus competencias.

El caso es que las primeras investigaciones sobre posibles casos de corrupción ligados al suministro de material sanitario durante la pandemia tienen su epicentro en Madrid, que, recordémoslo, fue la región europea con más sobremortalitat en la primera fase de la pandemia. El ministro de la presidencia, Félix Bolaños, ha dicho hoy a la cadena Ser una frase que recuerda mucho a la que dijo Pablo Casado sobre el hermano de Ayuso: "¿Cómo puede ser que mientras morían miles de personas alguien estuviera haciendo negocio con las mascarillas?". Bolaños no ha descartado que el PSOE acabe presentando una moción de censura en el Ayuntamiento de Madrid contra Almeida. La operación necesitaría el concurso de Ciudadanos, que podría apostar por convertir en alcaldesa a su líder en la capital del Estado, Begoña Villacís, a un año de unas elecciones que podrían dejar a los naranjas fuera del consistorio.

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