Sánchez comienza a mover presupuesto hacia Defensa: 2.000 millones de euros

El gobierno español traslada partidas obsoletas de otros ministerios a programas de armamento

La ministra de Defensa, Margarita Robles, en el Congreso, en una imagen de archivo
08/04/2025
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MadridPor el momento, la OTAN no acepta subterfugios para que España aumente el gasto militar. La semana pasada el secretario general de la Alianza Atlántica, Mark Rutte, rechazó que la inversión en ciberseguridad, terrorismo y control de fronteras pueda computar en el porcentaje del PIB de presupuesto en defensa, y este martes el consejo de ministros ha movido ya una partida de 2.084 millones de euros hacia el ministerio que dirige Margarita Robles. Esto no computará en el ejercicio de 2024 porque la OTAN da cifras sobre lo ejecutado durante el año en cuestión, pero España muestra que también se implicará en gasto estrictamente militar. Tal y como ha hecho en otras ocasiones, Sumar ha puesto reparos internamente al consejo de ministros, pero la decisión ha salido adelante igualmente.

Según explicaba El País el sábado, la gran mayoría de este dinero irá destinado a armamento: 870 millones a un programa de modernización de equipos de defensa de última tecnología y otros 803 millones al sistema de entrenamiento integrado del ejército del aire y del espacio, el sistema de defensa antimisiles para proteger barcos de la armada y, también, el mantenimiento y reposición. El resto, tal y como confirman también en el ARA fuentes del ministerio, se dedicarán a programas de apoyo logístico y cuestiones de gestión del ministerio, investigación y asistencia hospitalaria.

¿De dónde sale ese dinero? Fuentes del ministerio de Hacienda subrayan que proceden de partidas de otros departamentos que eran de pago único. Como los presupuestos actuales son los prorrogados del 2023, es dinero que ya se ejecutaba en su momento para una asignación que ya está satisfecha y, por tanto, ahora puede redirigirse hacia otro lado. Lo que Hacienda ha hecho es acumular varias partidas del presupuesto prorrogado que ya no debían pagarse y las ha orientado todas hacia Defensa, hasta sumar esos 2.084 millones. En cuanto a los programas militares a financiar, ya constaban en el presupuesto de 2023 prorrogados. ¿Y no tenían una dotación ya prevista? Sí, pero desde el gobierno español explican que se trata de contratos en los que el importe va subiendo año a año y, por eso, ahora era necesario enviar más presupuesto.

No pasar por el Congreso

Ésta es la fórmula a través de la cual, de momento, el gobierno español puede ir aumentando el gasto en defensa sin tener que pasar por el Congreso. No se trata de una modificación de crédito que sí necesitaría el aval de la cámara baja, sino un movimiento entre ministerios para el que tiene potestad el Ejecutivo. De hecho, en los últimos meses ya ha ido alimentando el presupuesto de Defensa de esta forma. En paralelo, Sánchez prometió en su comparecencia en el Congreso de hace dos semanas uno plan antes del verano de inversión tecnológica que no concretó cómo se financiaría. Todavía está a la espera de cómo se implicará la Unión Europea a la hora de financiar los esfuerzos de los Estados miembros y cuánto tendrá que salir de las arcas del Estado.

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