Tres nombres de una trama de espías y corrupción
Leire Díez, Javier Pérez Dolset y Víctor de Aldama protagonizan el último serial de la guerra sucia en el Estado
MadridAún lleva cola la semana más sórdida de la política española, con el espectáculo que Leire Díez, Javier Pérez Dolset y Víctor de Aldama protagonizaron el miércoles en un hotel de Madrid. Tres personajes hasta hace poco prácticamente desconocidos.
el ex militante del PSOE que va de 'farol'
Cuentan en el PSOE de Cantabria que siempre tenían problemas para llenar la lista electoral de Vega de Pas, en Cantabria, porque es un pueblo muy conservador. En el 2011 se prestó una militante vizcaína, Leire Díez (Portugalete, 1975), que en el 2005 se había comprado una cabaña pasea para pasar los fines de semana. Ya como concejala, pactó con el PP para echar al alcalde anterior. Dos años y medio después, el alcalde popular Juan Carlos García Diego expulsó del gobierno a los tenientes de alcaldía socialistas porque querían cobrar sueldos y dietas y se enteró de que grababan conversaciones.
Ahora Díez también está involucrada en grabaciones y hace favores al PP, aunque sea sin quererlo. Y es que es "más socialista que periodista", decía hace unos días García Diego en una entrevista en Antena 3. Coinciden personas que le han conocido en las filas socialistas: "Es la típica activista hooligan que iba a todos los actos y se tomaba fotografías con todos los dirigentes y les enviaba mensajes directos por Twitter". A Ferraz la califican de "friki". A pesar de ser la líder del PSOE en Vega de Pas porque era "la primera que pasaba por allí", entre 2015 y 2017 trabajó en el departamento de Comunicación del partido en Sándach. las primarias de 2017. En 2014, en cambio, había apoyado a Edu Madina.
En Cantabria sorprende que Díez ocupara cargos en empresas públicas como Enusa –fue directora de comunicación entre 2018 y 2021– y Correos –fue directora de relaciones institucionales y de filatelia–. Algunas fuentes apuntan a que en la empresa sobre combustible nuclear entró gracias a Cristina Narbona –exministra y ahora presidenta del PSOE– y ella misma ha explicado que para entrar en Correos se puso en contacto con el entonces presidente, Juan Manuel Serrano, exjefe de gabinete de Sánchez. Ahora asegura que quiere hacer un libro sobre las cloacas, pero todo el mundo lo pone en duda y le pregunta si tiene título, con qué editorial, cuándo lo publicará y de qué trabaja. Ella asevera que hace planes de comunicación para pymes que no quiere desvelar. Por lo general, hay desconfianza. De hecho, sobre las promesas al empresario Alejandro Hamlyn de poder negociar con la Fiscalía a cambio de información sobre miembros de la UCO, ha dicho: "Me tiré faroles como para iluminar una ida".
un personaje de videojuego
Quien haya seguido de cerca el tour mediático de Leire Díez en los últimos días, se habrá fijado en que no ha concedido entrevistas a Antena 3 oa la Sexta, dos canales del grupo Atresmedia. El motivo es el enfrentamiento que mantiene Javier Pérez Dolset (Jaén, 1969), el colaborador del exmilitante del PSOE que el miércoles se enfrentó al comisionista Víctor de Aldama cuando acudió a perseguirla en un hotel de Madrid. Pérez Dolset se considera una víctima de las cloacas del Estado porque sostiene que detrás de su imputación por la quiebra de su empresa tecnológica, Zed Worldwide, y un supuesto desvío de 100 millones de euros al extranjero, existe una maquinación de José Creuheras, presidente de Planeta –máximo accionista de Atresmedia–, junto al excomisario José Manuel Villarejo y la Fiscalía Anticorrupción.
En el 2017 fue detenido y encarcelado y pagó una fianza de 60.000 euros por salir en libertad. Desde entonces, su misión es demostrar las maniobras de las cloacas del Estado que, considera, siguen actuando, aunque sea con nuevos protagonistas. Pérez Dolset también acompañaba a Díez en la reunión de hace unos meses con un empresario imputado en el que le pedían trapos sucios sobre el jefe de delincuencia económica de la UCO.
Hasta ahora, Pérez Dolset hacía esta tarea desde un cierto anonimato –lo sabían los periodistas, pero no el gran público– y en colaboración con otras víctimas de la guerra sucia como el expresidente del Barça Sandro Rosell, que pasó dos años en prisión preventiva por una causa por la que acabó siendo abs irregularidades de Villarejo. Sin embargo, sus apellidos no deberían ser tan desconocidos: en 1998 triunfó con Comando, un videojuego que fue récord de ventas en decenas de países y que propició la expansión de sus empresas. Su negocio evolucionó y, entre otras cosas, desarrolló un software para hacer incidencia política en redes sociales que compraron tanto el PP como el PSOE, con algoritmos realizados en Rusia. Pérez Dolset denunció que un accionista ruso de su grupo empresarial asfixió económicamente a Zed, en connivencia con Planeta, para adquirirla a bajo precio, pero la Audiencia Nacional lo archivó.
el 'desokupa' que quiere acabar con Sánchez
La última vez que los medios habían captado a Víctor de Aldama (Madrid, 1975) estaba en Ibiza, a mediados de mayo, en unas vacaciones de lujo. Hasta que el miércoles apareció por encararse con Leire Díez, a quien él mismo ha reconocido que paró una trampa: se puso de acuerdo con Alejandro Hamlyn para grabarla buscando trapos sucios de sus adversarios y después filtrarlo a los medios. Y es que a principios de año, el comisionista del caso Koldo ya advirtió de que Díez y Pérez Dolset estaban contactando a empresarios imputados por el fraude en el sector de los hidrocarburos para chantajear.
Este empresario maniobra desde las cloacas ahora que se expone en prisión ya multas millonarias por sus corruptelas. Hasta que entró en contacto con Koldo García, el exasesor de José Luis Ábalos, se había movido por el mundo de los negocios con soltura: tenía múltiples sociedades, contactos diplomáticos en México y Venezuela y era cónsul honorario de Georgia en Zamora, localidad cuyo club de fútbol presidía.
Ha caído en desgracia corrompiendo a administraciones gobernadas por el PSOE y ahora quiere arrastrar a sus dirigentes. Asegura que aparecerán audios que involucran a la directora de la Guardia Civil en el caso Leire Díez y en sus declaraciones judiciales ha esparcido que ministros y dirigentes socialistas han cobrado comisiones ilegales, como Santos Cerdán. De momento, nada ha podido demostrar; sólo el piso para la expareja de Ábalos que sufragaba con dinero de la trama de las mascarillas. Aldama puso en marcha el ventilador contra todo el mundo a raíz de un extraño pacto con la Fiscalía Anticorrupción: accedió a sacarlo de la cárcel por el caso de los hidrocarburos a cambio de confesar sobre el caso Koldo en la Audiencia Nacional.
Semanas después, hizo nuevas acusaciones cuando compareció en el Supremo, donde acudió acompañado del líder de Desokupa, Daniel Esteve, una inspiración para la amenazante irrupción del miércoles en la comparecencia de Díez en un hotel de Madrid.