¿Vuelve el voto dual a Catalunya?

MadridDurante los primeros 30 años de democracia, de 1977 a 2011, en Catalunya se dio lo que los politólogos denominan "voto dual", es decir, que una parte de los electores votaban a una fuerza u otra en función de si eran elecciones catalanas o españolas. Esto hacía que en las elecciones a la Generalitat CiU obtuviera mayorías absolutas mientras que en las generales era el PSC el que arrasaba. Después de una década en la que el mapa político catalán no ha parado de moverse, ahora la encuesta anual del Institut de Ciències Polítiques i Socials (ICPS), un organismo adscrito a la UAB, dibuja un escenario similar pero con ERC y el PSC como protagonistas.

Así, si sumamos la intención de voto directa y la simpatía de partido, los socialistas serían los preferidos en unas elecciones españolas por un 24,1% de los ciudadanos con derecho a voto, muy lejos de ERC (14,1%), los comuns (12,9%) o Junts (7,2%). En cambio, en el caso de unas elecciones catalanas los papeles se intercambiarían y el liderazgo sería para ERC (21,2%), seguido del PSC (15,6%) y Junts (11,3%). Esto es así porque a la pregunta sobre qué partido defiende mejor los intereses de los españoles los encuestados señalan al PSC (22,8%), pero cuando se pregunta por los catalanes optan por ERC (26,1%). Y cuando la pregunta se hace en genérico («los intereses de la gente como usted») se registra un empate entre las dos formaciones.

Esta situación se da en un contexto de leve retroceso del independentismo: un 39,4% de los encuestados prefieren que Catalunya sea un estado independiente frente a un 52,9% que optarían por seguir formando parte de España. Llama la atención que solo a un 52,8% de los votantes de ERC les gustaría que el Procés acabara con la independencia de Catalunya, cosa que confirmaría que este partido se ha convertido en refugio de un voto independentista táctico. Sus dos líderes actuales, Oriol Junqueras y Pere Aragonès, son respectivamente el primero y el segundo mejor valorados con un 4,98 y un 4,55, por delante de Dolors Sabater (4,46) y Laura Borràs (4,34).

En el ámbito de la resolución del conflicto los indultos son bien valorados por un 62% de la ciudadanía, y curiosamente tienen más apoyo entre los votantes de los comuns (80,5%) que entre los de Junts (78,2%) o la CUP (73,2%). En cambio, la mesa de diálogo divide a la sociedad catalana en tres tercios, los favorables, los indiferentes y los contrarios. La posición contraria a la mesa de diálogo es la mayoritaria entre los votantes de Junts (53,8%) y la CUP (60,7%), pero también es la que tiene más apoyo en la triple derecha. Pero la población es muy escéptica sobre su resultado, y son mayoría los que creen que no habrá acuerdo (56%). Ni siquiera los votantes de ERC (60,2%) lo esperan. Eso sí, un referéndum sobre la independencia (66,5%) y una amnistía (66,6%) serían la solución preferida por la mayoría.

En conclusión, según la encuesta los catalanes están de acuerdo en la solución (referéndum y amnistía), pero son escépticos con la mesa de diálogo. Aun así, se sienten especialmente próximos a los dos partidos que lo han pactado: ERC y el PSC. La política (como la vida) siempre es compleja.