Barcelona cancela la pacificación de la calle Rosselló pactada con los vecinos
Reducir el tráfico en esta vía había sido la propuesta más votada en los presupuestos participativos
BarcelonaFue la propuesta más votada en el Eixample en el debate sobre los presupuestos participativos de 2021, pero el Ayuntamiento de Barcelona ha decidido no salir adelante. Al menos por el momento. El consistorio que dirige Jaume Collboni ha comunicado a los impulsores de la pacificación de la calle Rosselló entre la avenida Josep Tarradellas y la calle Comte d'Urgell que el proyecto queda cancelado. Así lo han denunciado en un comunicado la Asociación de Vecinos de la Izquierda del Eixample y entidades como Eixample Respira, la AFA Xirinacs y Camí Amigo y lo han confirmado al ARA fuentes municipales, que subrayan, sin embargo, que la cancelación ahora del proyecto no significa que la pacificación se descarte por completo.
Según estas fuentes, la pacificación de la calle Rosselló "sale de la lógica de los presupuestos participativos", ya que no se ha concretado ni podido ejecutar en los tiempos establecidos por el proceso del programa de los presupuestos participativos 2019-2023. Sin embargo, las mismas fuentes remarcan que esto no quiere decir que la medida se descarte definitivamente y apuntan a que el Ayuntamiento "seguirá estudiando y trabajando para ver la viabilidad futura de actuar en esta calle".
Los argumentos municipales no convencen a las entidades , que consideran que "hay herramientas suficientes" para cumplir con el compromiso de pacificar la calle Rosselló e interpretan que la decisión tomada "es únicamente política". Por ello, exigieron una reunión con el concejal del distrito, Jordi Valls, para conseguir que el consistorio "reconsidere la decisión". "El Ayuntamiento está fulminando la confianza en los futuros procesos participativos", se quejaron vecinos y entidades en un comunicado, que subrayaron que el anuncio de ahora llega después de que el Ayuntamiento haya cancelado también los proyectos de los ecochaflanes de la calle Aragó y del carril bici de la plaza Catalunya, que fueron respectivamente el segundo y el quinto proyectos más votados en el distrito. Sí se está llevando a cabo, en cambio, la reducción de un carril por el tráfico en las calles Aribau y Muntaner entre la avenida Diagonal y la Gran Via.
Un temor que viene de lejos
La pacificación de Rosellón propuesta por los vecinos y pactada con el consistorio pretendía conectar la avenida Josep Tarradellas y la calle Comte d'Urgell con una especie de eje verde que uniera la Modelo –donde están las escuelas Xirinacs y Entença– y la Hospital Clínic, pasando por equipamientos como los Jardines de Montserrat, el Espai de Gent Gran o la Escola Industrial. En el comunicado de este martes, los impulsores argumentaron que el proyecto "ha superado todas las fases del proceso participativo y las validaciones técnicas", y subrayaron que durante el proceso ya "han tenido que aceptar" varios recortes planteados por el consistorio , concretamente por parte de la concejalía de Movilidad.
El proyecto acordado finalmente preveía tener un carril de circulación, otro para las bicis y un cordón de servicios. Los tres debían estar uno al lado del otro para que los vehículos de emergencias tuvieran espacio suficiente para maniobrar en caso de ser necesario, lo que suponía aceptar que en algún punto las motos deberían pisar el carril de bicicletas para llegar a los estacionamientos.
Después de aceptar estos retoques, el noviembre de 2022 los vecinos ya alertaban de que querían que las obras empezaran ya para que el proyecto "no quede en un cajón". En un consejo de barrio incluso preguntaron al entonces concejal del distrito, Pau González, de los comunes, cómo podría afectar al proyecto un posible cambio de gobierno. González confió en que nadie alteraría una obra que nace de la voluntad de los vecinos. Sin embargo, ahora los temores de los vecinos se confirman.