La calle Balmes de Barcelona perderá un carril entre la plaza Molina y General Mitre
Las obras empezarán este otoño y servirán para ensanchar las aceras y mejorar el sistema de recogida de aguas
BarcelonaEl gobierno del Ayuntamiento de Barcelona ha aprobado en fase inicial el proyecto para la reurbanización de la calle Balmes entre la plaza de Molina y la ronda del General Mitre, en el distrito de Sarrià-Sant Gervasi. Se trata de un tramo de unos 600 metros que se transformará, a partir del otoño, para ganar espacio peatonal, con aceras más anchas (crecerán 1,9 metros) y nuevo arbolado. Las obras, que según la teniente de alcaldía de Urbanismo, Movilidad y Vivienda, Laia Bonet, son un "proyecto importante de mandato", tendrán un coste de 7 millones de euros. La ampliación de las aceras hará perder un carril de circulación de bajada en sentido mar. Ésta y otras intervenciones permitirán "mejorar la conexión entre los barrios de Sant Gervasi-Galvany y el Farró", ha insistido Bonet.
Cuando acaben las actuaciones este tramo de calle dejará de tener cuatro carriles para tener tres: dos carriles en sentido montaña –uno para el tráfico privado y uno compartido para buses y tráfico privado– y uno en sentido mar – tanto para buses como para el tráfico privado–. Los trabajos se extenderán a lo largo de 15 meses y permitirán también mejorar el sistema de recogida de aguas en este tramo de 15.000 m². Las aceras crecerán 1,9 metros respecto a su tamaño actual, alcanzarán una anchura de 4,35 metros a cada lado y se plantarán unos 110 nuevos árboles, según informó este miércoles el consistorio, para realizar "una transformación en línea con la mejora de la movilidad sostenible".
Para facilitar los desplazamientos a pie, el Ayuntamiento prevé dar nuevos pasos de peatones en plaza Molina, en Sant Hermenegild-Copèrnic en el lado mar y en Padua en el lado montaña. Además, se harán aceras pasantes en los cruces con la calle de Putxet, la calle Sant Hermenegild-Copèrnic y la calle Francolí. En el lado de subida habrá un cordón de servicios con 130 metros de carga y descarga y casi 150 plazas de moto, además de paradas de bus y contenedores.
El nuevo proyecto recoge uno de los dos tramos del proyecto ejecutivo que elaboró el Ayuntamiento entre 2017 y 2018, que planteaba la reurbanización de Balmes desde la plaza de Molina hasta la plaza de Joaquim Folguera. Quedará pendiente, pues, reurbanizar Balmes hasta la plaza Joaquim Folguera, lo que se hará una vez las obras de la L9 del Metro lo permitan y el Ayuntamiento disponga de dotación presupuestaria. Sobre la fecha de ejecución de este segundo tramo, Bonet afirmó que "ojalá estuviera cerca", pero admitió que se hace difícil saber cuándo será.