La irrupción de la IA generativa

Educació apuesta por hacer entrar la IA en las aulas

El departamento crea una guía que debe ayudar a los docentes a repensar la evaluación ante la irrupción de esta tecnología

Un docente utilizando ChatGPT
13/02/2024
3 min
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BarcelonaLo que hace poco más de un año entró en escuelas e institutos como una amenaza al modelo educativo tradicional, poco a poco se ha ido convirtiendo en una oportunidad. Una vez superado el susto inicial de la irrupción de la inteligencia artificial (IA) en las aulas –sobre todo por parte de los alumnos y de la mano del ChatGPT–, este martes Educación ha sentado las bases para orientar a los docentes en cómo aprovechar el potencial de esta tecnología en el mundo educativo.

Este martes el departamento liderado por Anna Simó ha presentado un documento con orientaciones y recomendaciones para utilizar herramientas de inteligencia artificial en los centros educativos. Aunque en el mismo documento se asegura que "se plantea con la voluntad de dar orientaciones sin establecer verdades absolutas ni indicaciones que sea necesario seguir obligatoriamente", algunos de sus puntos sí que evidencian una apuesta clara por adoptar esta tecnología, así como un toque de alerta para que los docentes empiecen a adaptarse a ellos. La guía la ha creado un nuevo grupo de trabajo sobre inteligencia artificial en educación que ha creado el propio departamento y el documento incluye herramientas y ejemplos de cómo muchos docentes catalanes ya están utilizando esta tecnología en las aulas, además de diversas recomendaciones para aplicarla con seguridad.

Incorporación crítica

En el documento de 25 páginas se deja claro que "los docentes deben poder conocer esta tecnología y reflexionar sobre su aplicación educativa". En este sentido, se insiste en que los alumnos ya lo están utilizando y que, por tanto, se les debe acompañar "para que lo hagan de forma consciente". También es necesario que maestros y profesores tengan en cuenta "la utilidad de la IA para el proceso de aprendizaje".

La guía, aparte de explicar desde cero en qué consiste la IA de forma sencilla y con conceptos básicos también expone los riesgos que puede suponer. Por ejemplo, se expone que es necesario que los alumnos sean conscientes de que, aunque muchas herramientas que utilizan IA son gratuitas, su uso tiene un precio, ya que se alimenta de los datos que le proporciona el usuario.- _BK_COD_ Repensar las actividades

Teniendo en cuenta que es una evidencia de que los alumnos ya utilizan herramientas como ChatGPT, la guía hace un llamamiento para que los docentes "repensen las actividades de aprendizaje y la evaluación, para evitar proponer tareas que fácilmente se pueden resolver con aplicaciones de IA". Más allá de evitar plagios, el documento alienta a los profesores a aprovechar lo que la IA puede ofrecer (siempre teniendo en cuenta que los menores de 13 años no pueden utilizarla y los menores de 18 necesitan autorización de los padres).

En este sentido, los expertos proponen utilizar herramientas de IA generativa como generadores de textos e imágenes, correctores, transcriptores o aplicaciones de realidad virtual para ofrecer una mejor personalización del aprendizaje. Sin embargo, también se hace una advertencia clara: el uso de esta tecnología debe responder a los objetivos de aprendizaje y no al revés. "Primero hay que determinar qué debe aprender el alumnado y después decidir si la tecnología ayuda", se asegura en el documento, que también advierte que puede haber casos en los que "la tecnología no surta efecto, en cuyo caso será mejor no introducirla".

En Tarragona ya hay una decena de centros que han empezado a implantar la IA en sus aulas de la mano de expertos de la Universidad Rovira Virgili. Uno de ellos es el Instituto Cal·lípolis de formación profesional, donde este septiembre unos ochenta docentes empezaron a formarse para utilizarlo en el aula. Su coordinadora pedagógica, Carme Prades, explica al ARA que este curso están utilizando IA en los ciclos sanitarios y en los de imagen personal. "Como por motivos de confidencialidad no podemos acceder a historiales clínicos de pacientes reales, utilizamos herramientas de inteligencia artificial para que creen otros nuevos, e incluso radiografías que podrían ser reales, para que los alumnos puedan practicar" , explica. También utilizan generadores de imagen para que elaboren "ideas de monstruos" que los alumnos de caracterización deben recrear con prótesis.

Útil para los profesores fuera del aula

Más allá de lo que ocurre en el aula, el documento presentado por Simó también aborda cómo la IA puede ser clave para hacer previsiones de cómo será la evolución de un alumno. Explican que a partir de los datos académicos de los estudiantes y utilizando aplicaciones de aprendizaje automático se pueden realizar previsiones para "facilitar la detección precoz y que la administración o los centros tomen las mejores decisiones" caso por caso. Además, también se pueden utilizar sistemas de IA para que analice los datos que el sistema educativo tiene de los docentes y sirva de base para poder diseñar planes de formación de centro más cuidadosos.

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