Hostales sociales financiados con parte de la tasa turística: la propuesta del síndico de Barcelona
Bondia pide que el Port y la Fira se involucren en la mejora de un sistema de alojamiento temporal para personas vulnerables
BarcelonaEl síndico de agravios de Barcelona propone que el sector turístico ayude a mejorar el modelo municipal de alojamiento temporal de urgencia. En un informe presentado este martes, David Bondia apuesta por un "cambio de paradigma" en un sistema que, según afirma, se ha demostrado "ineficaz" para cumplir con el objetivo de que hostales y pensiones sean un recurso temporal y de urgencia para que las personas vulnerables que son desalojadas pasen unos meses antes de volver a una vivienda.
Bondia señala que la crisis habitacional que comparten las grandes ciudades europeas se debe sobre todo a que el mercado de la vivienda temporal se ha comido el ordinario, algo que ha comportado la desaparición de oferta y una escalada de precios sin precedentes. Con esta premisa, el síndico se aventura a pedir al sector turístico que asuma parte de la responsabilidad social y pase a ser "parte de la solución" de la mejora del servicio, que no satisface ni a los beneficiarios ni al Ayuntamiento.
El síndico indica que una de las soluciones sería la tasa turística que recaudan los hoteles por cada estancia y que ahora mismo se debate en el Parlament de Catalunya. Por un lado, que una proporción concreta ("una parte alícuota") de este impuesto se dedique directamente a pagar las plazas que el Ayuntamiento contrata a hostales y pensiones privadas y que suponen una partida de 38 millones de euros anuales para el Ayuntamiento y, por otra, que otra parte proporcional la gestione el propio sector hotelero porque ofrece plazas en sus establecimientos para dar solución a casos "de vulnerabilidad urgente", como ya lo hizo durante el derrumbe del túnel del Carmenlo la crisis sanitaria de la covid.
Otra forma posible de ampliar este presupuesto a través de la colaboración privada es aprovechar "las bajas económicas no temerarias en las licitaciones públicas de servicios" para que se destinen a servicios sociales como los ATU. Se trata de las rebajas razonables que realiza una empresa cuando opta a un concurso público sobre el precio inicial previsto y que no ponen en riesgo la calidad del servicio prestado.
Más allá del ámbito estrictamente turístico, en el informe Bondia también pide que organismos como Fira de Barcelona y Puerto de Barcelona "se impliquen activamente" para reforzar los ATU. Son instituciones que sobrepasan las fronteras de la ciudad y es ésta otra de las propuestas: la mejora de la red de hostales y pensiones de servicios sociales debe abordarse desde el ámbito metropolitano y no desde soluciones municipio a municipio. Por eso, insta a crear un fondo de ATU metropolitanos y, para aumentar la oferta de viviendas temporales, potenciar la colaboración del sector público y las entidades del tercer sector para que aporten su parque de viviendas y ayuden en la planificación de políticas sociales.
Personas con voz y voto
Bondia quiere cambiar no sólo cómo y quién financia a los ATU, sino que también aboga por un cambio mental para que estas pensiones dejen de verse exclusivamente como una "simple gestión logística de plazas" y se conviertan en servicios que favorezcan la intervención integral con los usuarios. sobrepasan la estancia de seis meses prevista porque sencillamente no pueden acceder ni siquiera al mercado de vivienda protegida. 41% de los usuarios son familias monomarentales y también hay personas con discapacidad y situaciones sociales complicadas que les dificultan la rápida inserción laboral y social.
La reforma planteada por el síndico pasa por que las familias alojadas dejen de ser consideradas "receptoras pasivas" y sí "agentes activos" a quienes se les debe permitir participar en la planificación y gestión de los servicios. Hasta la sindicatura han llegado quejas por mala higiene o por albergar familias en espacios sin cocina o demasiado pequeños. Son quejas que rara vez tienen una respuesta ágil del consistorio. En este aspecto, Bondia apuesta por establecer un servicio de recogida de reclamaciones que responda rápidamente, así como que los usuarios participen en la "cogobernanza" de los espacios, una vía –afirma el informe– que serviría para "regenerar la confianza en el sistema" y en la percepción de que el Ayuntamiento les ofrece un "trato digno".