¿Quién debe pagar más tasa turística? El toma y daca de ERC y Comuns
Debía entrar en vigor el 1 de mayo, pero se aplaza a la espera de que los socios parlamentarios del Gobierno exploren un acuerdo entre ellos
BarcelonaNegociar a dos bandas un pacto a tres tiene sus peligros, y el Govern empieza ya a ver algunos de ellos. un pacto para doblar la tasa turística en Cataluña, esta semana el Govern se ha visto forzado a recular y aplazar su entrada en vigor ante las quejas de ERC y el toque de atención del Consell de Garanties Estatutàries. La nueva tasa debía aplicarse a partir de este jueves, 1 de mayo, pero, con esta decisión, hoteles, cruceros y pisos turísticos podrán pasar el verano con las antiguas tarifas si no hay giros de última hora.
El paso atrás del Gobierno ha calmado a los republicanos, que han accedido a votar a favor del decreto ley que contiene esta regulación (además de subidas de impuestos a los grandes tenedores) cuando llegue al Parlament la próxima semana. Sin embargo, este miércoles ERC redoblaba la presión y registraba una proposición de ley propia con una regulación alternativa de la tasa turística, en nuevo tira y afloja entre los dos socios parlamentarios del Govern. Según fuentes republicanas, el PSC se comprometió a aceptar sus propuestas en la tramitación del decreto como proyecto de ley, que pasan sobre todo por adecuar el tributo a las características del territorio.
La queja de ERC con el pacto entre los comunes y el Govern (que también enfureció al sector hotelero) es que no tenía en cuenta que la realidad turística de Barcelona es diferente "que la del resto del territorio". Dicho de otra forma: no es lo mismo un hotel de cinco estrellas en el centro de Barcelona que una casa rural en la Catalunya interior, ni por volumen de negocio ni por clientes. El texto pactado entre el ejecutivo catalán y el grupo de Jéssica Albiach ya diferenciaba entre Barcelona y el resto de Catalunya. Pero ERC plantea tarifas distintas y, sobre todo, que varíen en función de si la estancia es en temporada alta o en temporada baja. Las tarifas especiales se refieren a los establecimientos que se encuentran en zonas de juego.
En todo caso, el hecho de que ahora se haya acordado que la regulación no entrará en vigor hasta que el Parlamento apruebe el proyecto de ley es la misma jugada que ya hizo el ejecutivo catalán con la regulación del alquiler de temporada y habitaciones. En ambos casos implica chutar el balón adelante hasta que el Parlament no acuerde la nueva normativa. Con el alquiler de temporada, ERC, Comuns, CUP y PSC han pactado una tramitación urgente, que debería permitir terminar los trabajos en un máximo de tres meses. Está por ver si ocurrirá lo mismo con la tasa turística.
El aviso del CGE
Fuentes republicanas consultadas por el ARA niegan que la presentación de su propia propuesta suponga "desautorizar" a los comunes. Ahora bien, avisan de que ya trasladaron al Govern durante la negociación que no estaban de acuerdo con el contenido (aunque el ejecutivo catalán daba por hechos sus votos) y recuerdan que el mismo Consejo de Garantías Estatutarias tocó el corteza a Economía por haber subido un tributo vía decreto ley sin pasar por el Parlamento. "Si no queremos que nos lo tumben, debemos hacerlo bien", argumentan.
En lo que sí coinciden tanto Comuns como ERC es en destinar el 25% de la recaudación de esta tasa a políticas de vivienda, mientras que el 75% restante iría al fondo para el fomento de turismo. También avalan habilitar a los ayuntamientos para introducir un recargo, lo que hasta ahora sólo podía hacer el Ayuntamiento de Barcelona. Sin embargo, los republicanos son partidarios de que el recargo (que debía ser de hasta ocho euros para Barcelona y hasta cuatro euros para el resto de municipios) sólo pueda aplicarse en temporada alta.
Comunes quiere estudiarlo
Cómo han recibido los comunes el hecho de que, por ahora, su pacto quede en standby? Desde el grupo parlamentario evitan sangre. La líder de Comunes en el Parlament, Jéssica Albiach, dio este martes por bueno el aplazamiento decretado por el Gobierno para garantizar la "seguridad jurídica" en la aplicación de la tasa, sin mencionar el hecho de que los republicanos se hayan desmarcado del pacto. En cuanto a la propuesta de ERC, fuentes de los comunes aseguran que todavía deben estudiarlo y lo interpretan como una pista de las enmiendas que podrían defender en la comisión parlamentaria.
El problema con la triangulación entre Comuns, ERC y PSC podría volver a repetirse de cara a la negociación del tercer suplemento de crédito: el Govern debe negociar con los dos partidos, por separado, el destino de los 500 millones que quedan pendientes, una vez ya se ha asegurado los votos para la segunda inyección de recursos públicos –1.300 millones por pagar nóminas, para el plan de ayudas contra los aranceles y para la Energética.