BarcelonaEl interno que murió la cocinera de la cárcel y después se suicidó cumplía una condena de once años de cárcel por un delito de asesinato, según confirmó el Tribunal Superior de Justicia de Catalunya (TSJC). En abril del 2016 confesó haber muerto, también a navajazos, una prostituta de la que se había enamorado en Valls después de una discusión. El hombre terminaba la condena en el 2027. Según avanzó el sindicato CATAC y confirmaron poco después los Mossos d'Esquadra, el recluso habría asesinado a la mujer a navajazos sobre las 17 horas. Fuentes del centro penitenciario explican que una cámara de seguridad habría captado cómo el hombre cogía un cuchillo para cometer la agresión, que no ha sido grabada porque se habría producido dentro de una cámara frigorífica, en el mismo punto de prisión es donde los trabajadores han encontrado ambos cuerpos sin vida.
Según fuentes sindicales del centro, la cocinera habría elevado una incidencia contra el preso hace aproximadamente dos meses por una discusión y porque no le gustaba su comportamiento. Ambos llevaban un tiempo trabajando juntos en la cocina, una tarea a la que los internos pueden aspirar si tienen un buen comportamiento. La víctima, de mediana edad, ejercía funciones de jefe de cocina. Las mismas fuentes dicen que el preso fue apartado del puesto de trabajo unas semanas, pero el Centro de Iniciativas para la Reinserción (CIRE) acabó devolviéndole el trabajo hace pocos días.
En todo caso, fuentes de la investigación explican que siguen investigando otros posibles detonantes del crimen y que hay más hipótesis sobre la mesa. De hecho, los Mossos d'Esquadra han abierto una investigación para esclarecer las circunstancias del suceso y saber qué tipo de relación tenían la víctima y el preso, o si algún conflicto previo podría haber motivado el ataque. Fuentes policiales sí que tienen claro que el hombre habría actuado con una motivación y de forma consciente.
Fuentes penitenciarias confirman que no ha habido ningún otro trabajador fallecido en manos de un preso en una cárcel catalana desde que la Generalitat asumió su gestión, hace 40 años. La comitiva judicial practicó el levantamiento de los cadáveres entre las 18 hy las 20 hy el juzgado de Instrucción 3 de Tarragona en funciones de guardia ha abierto diligencias. El departamento de Justicia y la dirección del centro penitenciario de Mas de Enric colaboran con la investigación, según ha explicado la conselleria en un comunicado.
"También tenemos una investigación interna en marcha, pero de momento no tenemos más información", se ha limitado a decir la consejera de Justicia, Gemma Ubasart, que se ha desplazado este jueves hasta Mas d'Enric para añadir en el minuto de silencio que se ha convocado en todas las cárceles catalanas. Le ha acompañado el secretario de Medidas Penales, Armand Calderó, que sólo ha calificado el caso de "incidente muy grave". Ninguno de los dos responsables de Justicia han explicado qué protocolo de seguridad penitenciario existe en entornos sensibles como la cocina ni han valorado si éste ha fallado.
"Anomalía" y "dimisión"
Las banderas de todos los centros penitenciarios de Catalunya ondean a media asta como muestra de luto por el crimen, que ha sido la chispa para que seis sindicatos de trabajadores penitenciarios hayan convocado una manifestación a las puertas del departamento de Justícia, en Barcelona. "Hemos perdido a una compañera, nos la han matado", afirma Antonia que, como un centenar de trabajadores de prisiones más, se han desplazado a la Zona Franca para condenar los hechos y denunciar el aumento de las agresiones a los centros catalanes, informa Natàlia Fenollosa. Han pedido el cese "inminente" de la cúpula de la conselleria, con proclamas como "Consellera dimisión" y "Consellera asesina", ya que aseguran que han dejado a los trabajadores de las prisiones desprotegidos y que han intentado "negar las evidencias" reiteradamente .
De hecho, se han vivido algunos momentos de tensión, sobre todo cuando los manifestantes han intentado entrar en la conselleria sin éxito. Inicialmente, había poca presencia policial en este acceso, pero después llegaron refuerzos de antidisturbios que estaban en otra entrada. Los concentrados, algunos con la cara tapada, lanzaron huevos y otros objetos y los Mossos cargaron.
Manifestantes piden la dimisión de la consejera de Justicia, Gemma Ubasart, por la muerte de una cocinera de Mas de Enric. NF
El portavoz de UGT prisiones, Xavier Martínez, reprochó que, en el comunicado sobre los hechos, no se hable de un asesinato, sino de dos muertes violentas, sin diferenciar entre la trabajadora muerta y el preso que le ha asesinado. En este sentido, ha subrayado que el preso que ha fallecido la cocinera podía acceder a un espacio con acceso a cuchillos pese a haber sido condenado por homicidio con arma blanca; unos hechos que califica de "anomalía" y que demuestran que "falla el funcionamiento del sistema penitenciario catalán".
Desde el sindicato CSIF critican que la trágica muerte de la trabajadora es "la crónica de una muerte anunciada": aseguran que es la "culminación de una escalada de agresiones" ante las políticas "demasiado laxas" de la conselleria . Fuentes del sindicato UGT critican también que "trabajar en las condiciones actuales se hace muy difícil" y afirman que "cada vez hay internos más conflictivos". En su comunicado, CATAC también ha lamentado que el departamento de Justicia "ignore la grave realidad de los centros en cuanto a agresiones a sus profesionales".
En la protesta, los manifestantes han recuperado reivindicaciones históricas del colectivo, como un aumento de la plantilla, mayor formación, la consideración de agentes de la autoridad, un endurecimiento de las normas regimentales, ante los ataques que , dicen, reciben en las cárceles por parte de los internos. "Un spray sería una herramienta fantástica para reducir las agresiones”, ha subrayado Martínez, que ha añadido que la conselleria siempre se ha negado.
Agresión a Quatre Camins
También el miércoles se registró otro incidente entre un recluso y un funcionario de la cárcel de Quatre Camins. En este caso el trabajador sufrió una fuerte contusión en la cara tras ser golpeado por un interno que se encontraba en el departamento de atención especializada (DAE) y que posteriormente agredió a otros tres trabajadores que intentaban contenerle, según ha informado Efe .
El primero de los funcionarios agredidos tuvo que ser trasladado en una ambulancia hasta la mutua por una fuerte contusión en un ojo y en el pómulo, mientras que otros dos de los tres empleados del centro penitenciario requirieron también asistencia sanitaria del personal de Quatre Camins, según informaron fuentes del departamento de Justicia.