La amnistía
Nos levantaron la camisa con la primera amnistía y nos la levantarán de nuevo con la segunda. La de 1977 sirvió para blanquear el franquismo y asegurar la inmunidad de todas las fuerzas represoras, que siguieron haciendo lo mismo que hacían antes pero con un barniz democrático. La de ahora también servirá para impedir que se conozcan y se juzguen malos tratos, malversaciones, operaciones turbias, espionajes, lawfare y todo lo que se quiera, mientras que la judicatura creativa seguirá buscando modos para que no se pueda aplicar a las personas por las que estuvo diseñada. Al final, como siempre, haremos un pan como hostias; espero que ninguna autoridad vea delito de amenazas en esta frase, que tal y como va todo...
JOAN DOMÈNECH OLIVA
BARCELONA
Guetos de bajas emisiones
La definición de gueto dice: sector social, delimitado geográficamente, donde la mayoría de la población tiene características propias y diferenciadas que hacen que sea segregada del resto de la sociedad. Es lo que ocurrirá en Cerdanyola, y tal vez en otros municipios catalanes, si continúa la aplicación del modelo ZBE (Zona de Bajas Emisiones) de Barcelona. Un modelo que ya ha tenido derrotas judiciales y cuya incorrecta aplicación en municipios vecinos también ha tenido sentencias judiciales en contra. Es un modelo injusto, discriminatorio. Una mala copia que, de replicarse en otros municipios, generará un rechazo social que seguramente caerá en manos del populismo. La norma europea no exige una superficie concreta y incluya excepciones para los residentes. Es lo que han hecho 13 municipios en España. Comparen la ZBE de Sabadell con la ordenanza que se quiere aplicar en Cerdanyola. Sin olvidar el impuesto sobre el CO –privilegio de Catalunya– que grava la tenencia y no su uso. No podremos circular pero nos cobrarán por tener un vehículo llamado contaminante.
JORDI MATEU
CERDANYOLA DEL VALLÈS
¡Hablamos de Badalona!
Este verano estaba caminando cuando me fijé en los grafitis y carteles publicitarios colgados en las paredes de la calle del Mar. Me quedé mirándoles y me impactó la imagen de dejadez y suciedad que proyectaba una de las calles principales de la ciudad de Badalona.
A pesar de vivir más conectados que nunca a través de las redes sociales, hoy en día asistimos a un aumento de la soledad, la depresión y el estrés. Por eso es importante que la ciudad cuente con más lugares inclusivos que animen a las personas a salir a la calle ya interactuar. Habría que ampliar la red de parques y jardines donde los peatones sean los protagonistas; aumentar la presencia de verde urbano; crear nuevos espacios de descanso.
Hace muchos años que tengo un deseo: ver a Badalona como una ciudad atractiva, acogedora y deseable. La limpieza es fundamental, porque es lo primero que los vecinos y vecinas observamos cuando salimos a la calle.
Una Badalona que potencie referencias urbanas; que adorne la ciudad con estatuas; que fomente la oferta cultural promoviendo su legado romano, su gastronomía mediterránea y su entorno paisajístico; que refuerce la identidad en los barrios con un diseño que dé continuidad a todos los distritos de Badalona.
Me imagino el puente de la autopista y las farolas de la calle General Weyler pintadas con un verde intenso, enmarcando el Parque del Turó Caritg, como si fuera un cuadro de Monet. La plaza de Sant Josep transformada en un oasis urbano. La calle Francesc Layret convertida en un paseo peatonal con terrazas animadas y el aroma de la lavanda fluyendo entre la gente. Por la noche, las luces LED decorando el Puente del Petróleo. ¡Sería hermoso ver esta visión hecha realidad!
MARI CARMEN LOZANO PAREJA
BADALONA