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Clos Galena, la bodega elegida por los premios Nobel, celebra veinticinco años prodigiosos en la DOQ Priorat

El vino 'Clos Galena. 25 años de un sueño 2022' es una edición limitada, de poco más de 1.000 botellas, que conmemora la fecha

La directora Merche Dalmau junto a su hija, Cristina Pérez, el enólogo Toni Coca y el responsable de viticultura, Enric Amorós
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La historia de la bodega Clos Galena es una historia de amor, labrada con esfuerzo y superación. Todo empezó en 1999 cuando el farmacéutico y enólogo Miguel Pérez deseó hacer vinos en el Priorat. El deseo le inculcó a un equipo de entusiastas que le acompañaron desde el inicio: el enólogo Toni Coca, y su esposa, Merche Dalmau, así que en el 2002 ya ponían en el mercado el primer vino. En el 2013 moría por culpa de un cáncer cuando tenía 49 años, y Merche se colocaba a la cabeza para continuar con todo lo que su marido se había propuesto. Hoy, veinticinco años después, junto con Merche, hay una de sus tres hijas, Cristina Pérez y, como siempre, desde el inicio, el propio enólogo y Enric Amorós, en los viñedos como responsable de viticultura. Para celebrar que les mueve a todos el mismo entusiasmo por hacer vinos prodigiosos, elaborados con agricultura ecológica, la bodega acaba de sacar al mercado el vino Clos Galena. 25 años de un sueño 2022, una edición limitada de tan sólo 1.398 botellas, elaborado con un coupage de las variedades garnacha, cariñena, syrah y cabernet sauvignon.

Un racimo de uva de los viñedos ecológicos de la DOQ Priorat.

"Empezamos con once hectáreas, y ahora ya tenemos treinta", dice Dalmau, que explica con emoción todo el legado que han heredado de su marido, y sobre todo los hitos históricos que han conseguido como bodega. “Recuerdo cuando en el 2017 me avisaron que en el banquete de los premios Nobel estaban sirviendo un vino nuestro, el Formiga de Terciopelo del 2014”, relata, y añade el detalle de las imágenes que le hicieron llegar para que lo comprobara: una camarera sostenía con guantes blancos una botella del Hormiga de Terciopelo, que estaba a punto de servir a la princesa Victoria de Suecia. El prestigio que supuso el hecho fue unido al aumento de demanda de ese vino, que apareció enseguida descrito en el menú que se había servido en los premios. "Investigamos las minutas de los banquetes anteriores de los premios Nobel, y nos dimos cuenta de que ningún vino catalán había sido nunca seleccionado anteriormente", explica Toni Coca, ya su vez, Dalmau recuerda que Suecia es un país donde está vetado la promoción de alcohol, y por eso aún tiene más importancia la imagen que se difundió de la camarera con el Formiga de Vellut.

“Las emociones que me provocó ver el Formiga en los Nobel me lleva a pensar siempre en las viudas como yo que han sacado adelante los trabajos y la vida; yo me quedé sola con unas gemelas de diez años y una hija de trece cuando murió Miguel, ya mi lado Toni Coca, que me dijo que continuaba en el proyecto”, señaló Dalmau.

El Formiga de Terciopelo 2017 justo en el momento en que es servido en la cena de los premios Nobel.

Sobre la novedad, el vinoClos Galena. 25 años de un sueño 2022, Dalmau asegura que "será un vino irrepetible, que no tendrá continuidad". Por eso han hecho una edición limitada, y la han puesto a la venta a 125 euros. “En este Clos, como todos los Clos Galena, buscamos la mayor expresividad del territorio y que combine con la delicadeza”, comentó Dalmau en una cata vertical que tuvo lugar en el restaurante Via Veneto (c. Ganduxer, 10) .

Un vino único y diferente

Por su parte, el enólogo Toni Coca señaló que el vino conmemorativo es un vino distinto a todos los que han hecho hasta ahora. “Es un vino que sale de diferentes viñedos, concretamente de cinco, en los que interviene la cariñena vieja, la mejor garnacha que tenemos, la syrah, que siempre expresa carnosidad y algo de cabernet sauvignon, que le aporta un plus”, afirmó . De entre todas domina la cariñena vieja. La crianza, la han hecho con bota, buscando la sutileza que puede otorgar la madera. "Es un vino de guarda, que hemos hecho con honestidad para que el territorio se exprese".

En este sentido, enlazando con el concepto de honestidad comentado por Toni Coca, Dalmau sostuvo que los vinos de Clos Galena expresan el Priorat sin maquillaje. O dicho de otro modo, "cada una de nuestras botellas son un vehículo que transportan nuestro territorio".

Las cajas pintadas, el proyecto de Vino & Art de Clos Galena.

Los vinos de la bodega que en realidad se llama Dominio de la Cartuja, situado en el Molar, tienen unos precios en el mercado que rondan los 25 euros en el caso de Galena, y los 50 euros en el caso de los Clos Galena. Los Formiga de Seda, los 20 euros. Desde este mes de octubre comienzan la conmemoración de los veinticinco años. Como actos está continuar con el proyecto Art & Vi, comenzado en el 2010, con el que presentan cajas de vinos con las tapas pintadas por artistas de renombre.

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