Apertura

Cocina catalana bien hecha ya precios populares: así son los tres nuevos restaurantes en medio de Barcelona del cocinero Rafuel

Quiere compensar la oferta gastronómica adocenada de las zonas de mayor afluencia turística de la Ciudad Condal

4 min
El cocinero, fotografiado en la cocina particular de su casa

BarcelonaEl cocinero Rafa Antonín, conocido por su cuenta de Instagram Rafuel, acaba de abrir dos restaurantes en medio de Barcelona, ​​de nombre Casa Rafuel, situados en la calle Còrsega, entre el Palau Robert y la rambla de Catalunya. Finaliza uno tercero, situado en la calle Madrazo, 119, que se llamará La Naranja de Barcelona, ​​y que dice que será "un bar de toda la vida, con tortillas y bocadillos especialmente". Es una inversión primordial para el hombre que un día decidió hacer jubilación activa cuando se retiró de la empresa donde había trabajado toda su vida para dedicarse a cocinar tras el éxito que le supuso que su hija Virginia Antonín le abriera la cuenta de Instagram.

Uno de los espacios del restaurante situado en la calle de Córcega.

Todo ello lo hace con un único objetivo: difundir la buena cocina y especialmente los platos de cocina catalana. “Decimos que no hay forma de encontrar cocina catalana en Barcelona, ​​y menos si es a precio económico, pero nadie hace nada, sólo nos quejamos; por eso me lo he propuesto, porque es necesario actuar para difundirla”, explica Rafuel, con el que es conocido en la red social Instagram pero también entre sus amigos, porque el nombre es una mezcla creativa de dos palabras, Rafael y fuel, ámbito al que se dedicó profesionalmente.

Los dos primeros restaurantes

Los dos primeros restaurantes abiertos son los que están situados en la calle de Còrsega, que comparten terraza, de capacidad para treinta personas, aunque no están situados pared a pared, pero la buena distribución de los locales lo permite. En medio, les separa una portería de un edificio y la tienda mítica Piera. Pero el local del chaflán de rambla de Catalunya tiene puerta a Córcega, y de ahí que la terraza esté en esta calle, y acabe juntándose con la del otro restaurante. De momento, uno de los dos locales tiene las obras terminadas, pero el otro no. "Todo es muy nuevo; hemos abierto hace muy poco, en agosto, y queremos reformar todo el interior para que tengan semejanza", explica Rafuel.

El distintivo azul destaca en los locales situados en la calle que comunica el Palau Robert con rambla de Catalunya.

En las cartas de los dos locales, compartidas, hay bocadillos fríos y calientes, bikinis, pinchos de trucha, platillos y postres. Fuera de la carta, hay sugerencias, como fideuá, que es el que plato ofrecían en lunes. Cada día habrá uno diferente. Los precios oscilan entre los tres euros, el más económico, que corresponde a los dulces, y los 11,50 €, que es el plato más caro de toda la carta: se trata de la cola de buey al horno con verduras. “Es una carta provisional, que iremos ampliando a medida que vayamos haciendo tiempo porque justo acabamos de abrir”, dice Rafuel, quien añade que la idea con la que trabaja también es la de hacer arroces. Las cartas están escritas en catalán y en castellano, y aunque en las pizarras exteriores de uno de los locales sólo están los platos escritos en castellano, cuando tengan las obras terminadas, lo harán en catalán, aseguran.

El interior del restaurante Casa Rafuel del chaflán de rambla de Catalunya.

El hecho de que ahora haya una amplia oferta de bocadillos fríos y calientes también se debe a los horarios con los que trabajan, extensos, y que abarcan desayunos, comidas y meriendas hasta las 20 h de la tarde. "Abrimos desde las ocho de la mañana, así que ofrecemos desayunos para quienes quieran comer un buen bocadillo de ternera, de ventresca de atún o de jamón ibérico", por decir algunos de los ejemplos de bocadillos. También hay otros, como el de lomo y queso.

Y cuando llega la hora de comer, los platillos, muchos de los cuales ha explicado en su cuenta. No faltan las bravas (3,50 €), la ensalada rusa (3,50 €), la ensalada de tomate con bacalao y anchoas (7,00 €), las albóndigas (7,00 €) o el rap (8,50 €), por citar algunos.

El postre también merecen un buen párrafo porque Rafuel apuesta por los cruasanes de la pastelería Sacha, de diferentes variedades y gustos; las ensaimadas de la misma pastelería, los bikinis de Nutella y los pasteles caseros. “Esta oferta es con la que hemos empezado ambos locales, uno de los cuales todavía está en obras por dentro; el otro está todo listo”, dice Rafuel. En la calle Madrazo, a finales de septiembre, tiene previsto abrir el tercero. Y todo con la misma idea, que repite una y otra vez: “Debemos demostrar que en Barcelona se come muy bien, que nuestra cocina es buenísima”.

El cocinero Rafuel participará en el Festín Fest del diario ARA

El cocinero popular de Instagram Rafuel será el encargado de hacer los showcookings en el Festín Fest del diario ARA, que tendrá lugar el sábado 14 y el domingo 15 de septiembre entre las 15.30 y las 16.30 h en la Antigua Fábrica Damm de Barcelona (c. Rosselló, 515). El chef preparará elaboraciones frente al público asistente, que previamente se habrá inscrito en los talleres, y podrán realizar una cata mientras le preguntan dudas sobre las recetas o sobre otras cuestiones relacionadas con gastronomía. Rafuel es colaborador del diario ARA, donde ha explicado algunas de sus mejores recetas:

  • Espaguetis en salsa puttanesca. Consulte su receta aquí.
  • Huevos en el plato con salsa puttanesca. Consúltela aquí.
stats