El número trece de Corpinnat: se incorpora a la marca la bodega Cisteller de Subirats
La bodega de Subirats hace vinos tranquilos y también espumosos, que entrarán en el mercado a partir de enero
La bodega Cisteller de Subirats es la decimotercera de Corpinnat, cuyo director, Ton Mata, ya anunció el pasado septiembre que la marca podría ensancharse a los pocos meses. "El número trece nos gusta mucho, porque somos muy fans de las películas de terror, y por eso ya hemos indicado en todas partes que somos el decimotercer de Corpinnat", explica el enólogo Sergi Canals.
Sergi Canals y Jessica Madigan añaden que desde el 2020 empezaron las negociaciones con Corpinnat, que los primeros vinos tranquilos los elaboraron en el 2022 y la primera añada de burbujas será la que se podrá encontrar en el mercado a partir del próximo febrero. Se trata de dos espumosos que llevan por nombre Cisteller Lucidity y Cisteller Courtship. “En las burbujas hemos elegido nombres ingleses mientras que para los vinos tranquilos no es así, se llaman Cisteller Gris, Cisteller Malvasia de Sitges, Cisteller Verbena y Cisteller Xarel·lo”, señala Sergi Canals.
Producción creciente
El objetivo de producción de ambos enólogos, que se conocieron estudiando en Estados Unidos, es llegar a las cuarenta mil botellas, desde las veinticinco mil que producen ahora. Exportan a diez países, en una proporción de 60% en el extranjero y un 40% en Cataluña.
La curiosidad de la marca está centrada especialmente en la elección del nombre, Cisteller. "Mi abuelo era de Badalona, y se trasladó a vivir a Sant Sadurní, donde se convirtió en el primer cestero de la población", explica Sergi Canals. Curiosamente, el abuelo creaba cestos de mimbre para la vendimia, para cosechar la uva, y ahora aquella uva es la que cosecha en viñedo propio y también arrendada la nieta con su pareja.