El Queso Garrotxa se blinda contra imitaciones (en un momento crítico para la elaboración)

GeronaEl Queso Garrotxa sólo podrá hacerse de una única manera, porque desde hoy ostenta oficialmente el sello de Indicación Geográfica Protegida (IGP), de modo que se convierte en el segundo queso de Cataluña que tiene esta distinción (el primero va ser el queso del Alt Urgell y la Cerdanya, que cuenta con una denominación de origen protegida). Aprobada la IPG en Bruselas a finales del año pasado, el consejero de Acción Climática, David Mascort, la ha hecho pública en la Feria del Queso Artesano y Catalán de Girona, que ha reunido cuarenta y dos queserías con dos -cientos quesos diferentes. Ahora bien, los productores han apuntado a la crisis de la materia prima, la leche de cabra, necesaria para elaborarla.

Así pues, el Queso Garrotxa se podrá decir de esta manera si está hecho con leche entera de cabra pasteurizada, si ha madurado casi un mes y se crea un hongo natural, endémico, en su exterior, que va saliendo a medida que los queseros lo rozan para crear su costra gris aterciopelada. Además de por el color gris, también se caracteriza por tener forma redonda. Por dentro es de color blanco impoluto, casi podría decirse que de color de nata.

Sobre la protección europea, los queseros comentan que llega en uno de los momentos más delicados por la falta de leche de cabra. “El futuro es incierto, porque no conseguimos leche. Por tanto, no sabemos qué podremos hacer, porque si no lo hay, no lo hay”, ha afirmado la elaboradora de quesos Muntanyola. Ahora bien, el conseller, David Mascort, ha sostenido: "Con la IGP podremos ayudar a los elaboradores del Queso Garrotxa, porque sabemos que falta leche de cabra, porque sois muchos los que hacen productos muy buenos". Además, el conseller ha añadido: "Debemos ayudar a la gente del sector primario para que se ganen mejor la vida". Por su parte, el cocinero Pep Nogué ha indicado que "el Queso Garrotxa gusta tanto a pequeños como a grandes y sólo necesita un pedazo de pan para saborearlo". Y ha asegurado que, aunque la IGP puede ayudar a dar a conocer este queso en el mundo, si hay poco, por la falta de materia prima, "que se quede todo en nuestra casa".

Por último, la etiqueta IGP es una de las tres que otorga la Unión Europea (las otras dos son la DOP y la de especialidad tradicional garantizada, la ETP). En el caso de la IGP, la Unión Europea reconoce la calidad vinculada a un área geográfica concreta, que es la que produce, procesa o elabora el producto.