Egipto descubre perdida bajo la arena una ciudad de hace 3.000 años
La Pompeya del Antiguo Egipto es el hallazgo más importante desde la tumba de Tutankamón
BarcelonaLa misión egipcia dirigida por el arqueólogo Zahi Hawass ha descubierto una antigua ciudad en Luxor, el Ascenso de Atón, que se perdió bajo la arena hace 3.400 años y está en buen estado de conservación. Denominada popularmente como la Ciudad Dorada de Luxor, fecha del reinado de Amenhotep III, uno de los faraones más poderosos, pero también vivieron los faraones Tutankamón y Ai. "Muchas misiones extranjeras han buscado esta ciudad y nunca la habían encontrado. Empezamos buscando el templo mortuorio de Tutankamón porque los templos de Horemheb y Ai se encontraron en esta misma zona", ha explicado este jueves Hawass en declaraciones recogidas por varios medios egipcios y Europa Press. La expedición se sorprendió al descubrir formaciones de ladrillos de barro que iban en todas direcciones, y en un tiempo prodigioso han descubierto la ciudad más grande hasta ahora en Egipto.
La excavación empezó en septiembre de 2020 y, en cuestión de semanas, desenterraron los restos de una gran ciudad en buen estado de conservación, con muros casi completos y habitaciones llenas de utensilios para la vida cotidiana: hornos, estatuas, recipientes... Las capas arqueológicas han permanecido intactas durante miles de años, dejadas por sus antiguos residentes. También hay esqueletos humanos. "Las calles de la ciudad están flanqueadas por casas; algunos de sus muros tienen hasta 3 metros de altura y podemos revelar que la ciudad se extiende hacia el oeste, hasta la famosa Deir al-Madinah", ha destacado el arqueólogo. El conjunto recuerda otro lugar arqueológico famoso: sería como la Pompeya del Antiguo Egipto. Los expertos reclaman la necesidad de conservarlo todo como un parque arqueológico.
El más importante desde Tutankamón
Fundada por uno de los más grandes gobernantes de Egipto, el rey Amenhotep III, noveno rey de la XVIII dinastía, que gobernó Egipto del 1391 al 1353 a.C., la ciudad estuvo activa durante la regencia del gran rey con su hijo, Amenhotep IV, conocido como Akenatón. Esta ciudad fue el asentamiento administrativo e industrial más grande de la era del imperio egipcio en la orilla occidental de Luxor, cerca de los Colosos de Memnón, el templo de Medinet Habu (el Ramesseum) y el templo mortuorio del rey Ramsés II, cerca del Valle de los Reyes.
Para Betsy Bryan, profesora de egiptologia de la Universidad Johns Hopkins, en Baltimore, se trata del descubrimiento arqueológico más importante en Egipto desde la tumba de Tutankamón. "El descubrimiento de la Ciudad Perdida no solo nos dará una nueva visión de la vida de los antiguos egipcios en el momento en el que el imperio estaba en su momento más rico, sino que nos ayudará a arrojar luz sobre uno de los más grandes misterios de la historia: el motivo de la mudanza a Amarna de Akenatón y Nefertiti". "Este lugar proporcionará información durante muchos años", afirma Bryan.