Teresa Sagrera gana el premio Nèstor Luján de novela histórica
'El corazón del balneario' se ambienta en 1919 en un balneario de Caldes de Montbui
BarcelonaLa maestra y escritora Teresa Sagrera Bassa (San Pedro de Vilamajor, 1966) ha ganado la 28ª edición del premio Nèstor Luján de novela histórica con El corazón del balneario (Columna), una historia ambientada en 1919 en un balneario de Caldes de Montbui. Un día Lola llega al balneario con el propósito de cumplir la última voluntad de su madre, que acaba de morir: entregar una caja de música a Ignasi Ventura, el propietario del Balneario Ventura. Secretos familiares y tensiones sociales de una Cataluña en ebullición por los movimientos sindicales y las luchas obreras dan forma a la novela de Sagrera, que ya había sido finalista del Néstor Luján en el 2012 con Confidencias de una reina (Columna, 2013), que se adaptó al teatro en 2014. El corazón del balneario es su séptima novela, de las que seis son novela histórica.
El jurado formado por Gloria Gasch, Tin Luján, Maria Carme Roca, Vicent Sanchis y Jaume Sobrequés concedió de forma unánime el premio, dotado con 6.000 euros. "La novela es muy completa –explica Maria Carme Roca en nombre del jurado–. Retrata una época muy interesante y un espacio muy atractivo, un balneario, con la presencia benéfica del agua". Roca también destaca el personaje de Lola y "la firmeza y el espíritu luchador con el que aún tanto su futuro como su pasado, decidida a descubrir todo lo que se esconde". El crecimiento de Lola, señala Roca, es "muy guapo porque va de la mano con todos los cambios de una época que va de la dictadura de Primo de Rivera en la Segunda República". La novela sale a la venta este miércoles.
"Ganas de siglo XX"
En las anteriores novelas históricas de Sagrera la acción se ambientaba en el siglo XII, XIV o XIX, entre otros períodos, pero El corazón del balneario es su primera incursión en el siglo XX. "Tenía muchas ganas de siglo XX y de contar una trama de sentimientos y de personas –dice la autora–. Y situarlo en un lugar donde hay clientes habituales que van y vuelven crea una telaraña de relaciones muy golosa ". Una decisión clave de la novela fue la elección del Balneario Rius como inspiración. "Me encandiló", confiesa Sagrera. "Era uno de los más grandes de Caldes, tenía más de ochenta habitaciones y era reconocido en toda Europa por su lujo. La novela arranca durante la época dorada de los balnearios, cuando ya han dejado de ser sólo casas de baños y s 'han convertido en espacios de ocio y ocio donde la gente no va sólo a hacer cuidados o terapias. Y en ese momento Caldes era la villa termal más importante de Cataluña, y seguramente de España'.
El Balneario Ventura –Sagrera cambió el nombre para no incomodar a los descendientes de los propietarios– acogió, por tanto, a visitantes ilustres, y El corazón del balneario lo refleja. "En la novela aparecen personajes reales como el pintor Joaquim Mir, que hace una exposición, y los personajes hablan de las visitas de Isabel II y Primo de Rivera, pero están en un segundo plano", dice la autora , que se ha esforzado por capturar el contraste entre las clases acomodadas que llegaban en el lujoso ferrocarril construido para los clientes del balneario y los trabajadores del balneario y de la villa, donde había "una industria a pequeña escala" con canteras de donde salían los adoquines de las calles de Barcelona. "Los balnearios son mundos en miniaturas, ya través del personaje de Lola quería explorar los cambios de la sociedad catalana a lo largo de más de una década de grandes transformaciones sociales –apunta Sagrera–. Ella nos irá explicando cómo cambia este universo, pero también cómo cambia ella misma".