Apuntes en caliente

Calma, que este equipo todavía no ha hecho nada: los apuntes en caliente del Eintracht-Barça

Los azulgranas empatan en Frankfurt un partido que se merecían perder

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Los jugadores del Barça, en Frankfurt.

BarcelonaEmpate y gracias del Barça en Frankfurt contra el Eintracht. Los de Xavi Hernández sufrieron la intensidad local y tendrán que mejorar en el Camp Nou la próxima semana para levantar la eliminatoria. A continuación, los apuntes en caliente del encuentro.

Empate inmerecido. "Todo el mundo está preparado y si la actitud no es buena te pasan por encima". No será que no lo avisó Xavi en la previa. No será que el Villarreal, con su victoria sorprendente contra el todopoderoso Bayern en la Champions, no lo demostró. En Europa no se puede salir a pasear. Y aunque el Eintracht vaya noveno en la Bundesliga y carezca de jugadores muy conocidos, tiene una tradición y una afición fiel que le pedían jugar contra el Barça como si fuera la última vez. Los azulgranas son superiores a los alemanes, pero no se merecieron el empate que consiguieron. El estribillo debe ser diferente. Este equipo todavía no ha hecho nada.

Superioridad estéril. Adama presentó contra el Eintracht una estadística impoluta en cuanto a regates intentados. Ya se sabe: cuando pone a trabajar su físico abierto a la derecha en tres cuartos de campo, no hay defensa que le pare. Otra cosa es que después haya un provecho real de esa superioridad. Y aquí es donde hay que dimensionar que solo haya brillado en el Wolverhampton, que Luis Enrique ya no le llame con la absoluta, que todavía no haya marcado ningún tanto desde su regreso al Barça o que el partido en Alemania cambiara a mejor cuando él salió del campo. Es mejor que Trincao, sí, pero quizás no tanto como para pagar 30 millones.

Una sociedad con margen de mejora. El fútbol se construye a partir de mecanismos colectivos pero también de complicidades individuales. Y, en este sentido, en Frankfurt se echó de menos la que han desarrollado, bajo la batuta de Xavi, los dos interiores titulares últimamente: Pedri y De Jong. En tierras alemanas, Frenkie descansó en beneficio de Gavi, que no salía de inicio desde el 4-0 en Osasuna y no estuvo demasiado fino. No criticaremos el rendimiento del andaluz, que solo tiene 17 años y es carne de leyenda culé. Solo señalaremos que su mezcla con Pedri, otro joven llamado a hacer historia, tiene margen de mejora.

Capitán en potencia. Tras golear en el Bernabéu y jugar muy bien ante el Sevilla, el Barça dio un pasito atrás en Frankfurt. Los culés fueron peores que su rival. Sin embargo, existen actuaciones rescatables. Por ejemplo, la de Ferran Torres, autor de las ocasiones más claras y del gol del empate después de una gran asociación con De Jong. Pero sobre todo la de Eric Garcia, erigido en líder de la defensa cuando Piqué pidió el cambio por lesión. El de Martorell es un capitán en ciernes, un central hecho para partidos grandes, como demostró hace 20 días en Madrid y en un partido de riesgo como el que planteó el Eintracht.

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