¿Se ha hecho el juego de palabras con Marbella y maravilla?: Los apuntes en caliente del Benfica-Barça

BarcelonaÉpica victoria del Barça en Lisboa en la ida de los octavos de final de la Champions. Con 10 jugadores y sufrimiento hasta el final. A continuación, unos apuntes en caliente.

La envidia de Europa. En las fotos saldrá Raphinha porque decidió que su 25º gol esta temporada fuera prácticamente tan decisivo como en los 24 anteriores. Los cronistas también pondrán a Szczęsny por las nubes porque sostuvo al equipo con paros geniales en un estadio donde no hace tanto recibió cuatro goles. El regreso del polaco a la profesionalidad está recordando nada menos que al de Michael Jordan. Pero es imposible explicar a este Barça aspirante a todo sin Pedri, que ha pasado de ser comparado con un jugador de Kings League a convertirse en el mejor centrocampista del mundo. Domina los partidos como el mejor Xavi y frota la lámpara cerca del área como el Iniesta más entonado. Europa, a sus pies.

De todo menos una imprudencia. Puesto que el riesgo es esto, riesgo, hay algunas veces que te puede exigir de tal forma que salgas esquilado. Es lo que le ocurrió a Cubarsí en una gran internada de Pavlidis. El delantero griego que se disfrazó de Ronaldo (no de Cristiano, sino el bueno) para plantarse solo ante Szczęsny y obligó al de Estanyol a ir al suelo para evitar el 1-0. ¿Qué debía hacer el chaval si está educado en el atrevimiento y domina el arte del tackle? Nada que reprochar, Pablo. Continuarás siendo el mejor central joven de Europa. Lo peor de todo es perderte para la vuelta.

Pragmatismo y muecas. Sí jugará el segundo asalto de la eliminatoria Lamine Yamal, que en Lisboa fue sustituido porque el Barça, con 10 jugadores, estaba siendo masacrado a internadas rivales por su parte. El de Rocafonda desaprobó la decisión de Flick, que también sacrificó a Olmo para mantener a Lewandowski y apostar por el juego directo para minimizar la inferioridad numérica. Lo bueno de la secuencia es que al alemán nadie le criticará por su pragmatismo. La no tan buena es que Lamine Yamal debe aprender que la primera prioridad del fútbol es el bien colectivo. Basta muecas, va.

Fumadores que son decisivos. Es más fácil retirar el plástico de un CD que encontrar a un solo futbolista del que Flick no esté extrayendo el mejor jugo. Incluso De Jong, al que medio barcelonismo quiere poner un lacito, se parece más que nunca al jugador exuberante que estaba en el Ajax. Pero atención a Szczęsny. Cabe insistir en que este polaco de vuelta de todo está jugando la Champions cuando hace unos meses estaba tomando el sol en Marbella. En Lisboa, encima, realizó cuatro paradas milagrosas que el barcelonismo recordará sobre todo si hay títulos a final de curso. Como los goles de Mathieu, otro fumador, en la temporada 2014-15. ¿Se acuerdan?