Los ricos pagan la fiesta: hasta 2.000 euros para ver al Barça-PSG
El club ve en la Champions una oportunidad de oro y dispara los precios de las entradas para ayudarle a cumplir con el presupuesto de la temporada
BarcelonaPor más que pueda parecer una labor rutinaria, la elaboración de los presupuestos del Barça es uno de los temas más complejos que tiene entre manos el área económica del club. De la previsión de ingresos y gastos depende el famoso fair play financiero, que determinará la capacidad blaugrana para fichar. La incertidumbre de la competición, saber si el equipo funcionará y conseguirá los premios deportivos, o si la afición apoyará al equipo y comprará entradas, son condicionantes que pueden provocar desviaciones multimillonarias en las cuentas. Lo sabe bien la entidad, que se enganchó los dedos durante dos cursos consecutivos al caer en la fase de grupos de la Champions cuando pensaba que llegaría al menos a los cuartos de final.
Aunque el Barça haya vivido un contexto de vacas flacas, el área económica ha mantenido la misma política de las últimas décadas: elaborar los presupuestos previendo 15 millones de ingresos por ser uno de los ocho mejores equipos de la Champions. Un hito que, cuatro temporadas después, se ha vuelto a conseguir. Esto supone que el club tenga garantizados 10,6 millones por parte de la UEFA –que hay que sumar a los premios obtenidos en las anteriores rondas–. Pero ese dinero es menos del proyectado. ¿De dónde sale el resto? Se deben conseguir a través de la venta de localidades, sea al público general o en lonjas vip. Y el gran handicap es que el equipo no juega en el Camp Nou, sino en Montjuïc.
30.000 entradas a la venta
Lluís Companys tiene la mitad de aforo que el estadio del barrio de Les Corts, ahora en obras. Aunque el problema no es el número de localidades totales, sino los asientos que están a la venta. De los 50.000 disponibles actualmente, 17.500 están reservados para quienes adquirieron un pase de temporada. Aficionados fieles que, como explica el club, en un 97% de los casos no fallan en los partidos. Descontando las 2.600 localidades que se destinan para la afición rival –a precios más económicos–, quedan unas 30.000 para el público general. Y de éstas aún deben restarse las que se queda la entidad para satisfacer sus compromisos, ya sea con jugadores o con patrocinadores.
Según los antiguos responsables de ticketing, en el Camp Nou se partía de unas 22.000 localidades disponibles para la venta en general. A estas se restaban los compromisos del Barça, pero se añadían las que los abonados ponían en la modalidad del Seient Lliure. La cifra no era fija y oscilaba en función de los partidos, pero "siempre se alcanzaba una media de entre 25.000 y 30.000 liberaciones". En un partido de Champions, en el que debía descontarse el 5% de entradas para la afición rival –un imperativo de la UEFA–, acababan teniendo unas 40.000 entradas por vender. "Pueden parecer muchas, pero se repartían con los turoperadores y la mayoría se acababan vendiendo, sobre todo si el partido se programaba con semanas de antelación", explica un antiguo ejecutivo azulgrana. Así se alcanzaba los 5 millones de ingresos, lo que era el equivalente a vender las entradas a un precio medio de unos 125 euros.
Como esta temporada hay muchas menos entradas a la venta –pero el club ha previsto los mismos ingresos que en años anteriores–, la única solución era aumentar los precios. Nada mejor que un partido europeo de máximo nivel como un Barça-PSG para hacer cajón. Y, de paso, ayudar a secar los 30 millones de euros de desviación que tiene el club en los presupuestos de esta temporada.
Los precios se encarecen una semana después de ponerlos a la venta
Pero el área de ticketing ha ido más allá. Si hace una semana puso las entradas a la venta a precios muy elevados, ahora ha aumentado aún más su coste. Según la última consulta, hecha por este diario el 25 de marzo, las entradas más baratas, las Basic, cuestan de 209 euros (córner, 2ª gradería) a 484 (tribuna, 1ª gradería). La semana anterior costaban de 174 a 399 euros. Estos precios han generado impacto entre la masa social azulgrana, y entidades como la Penya Almogàvers han respondido a las redes calificando de "insulto" estos "precios desorbitados".
Hay más entradas a la venta, más lujosas y caras, que también tienen más servicios a cambio. Las Basic Plus garantizan tener asientos con mejor visibilidad, y van de los 269 a los 544. Y para los amantes del fútbol y la gastronomía están las Vip, localidades normales pero con acceso al catering. Las que están disponibles en el momento de realizar la consulta cuestan 725 euros (al gol) o 995 (a tribuna). Y, por último, están las Vip Premium, zonas y asientos de lujo, además de los canapés, que van de los 1.625 (parte superior de tribuna) a los 1.925 (junto a los banquillos). Un baremo de precios similar al del clásico contra el Real Madrid de octubre. Ese día se recaudaron 7 millones.