Apuntes en caliente

Una teoría que hace aguas por todas partes: los apuntes en caliente del Barça-Almería

No, la plantilla azulgrana no es mejor que la de la pasada temporada

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João Félix pugnante con Chumi y Montes en el Barça-Almería.

BarcelonaVictoria ajustadísima del Barça contra el Almería en Montjuïc. El paro navideño será menos duro gracias a un triunfo balsámico pero que no aparta las dudas sobre el juego del equipo y la calidad de plantilla. Unos apuntes en caliente a continuación.

Dos goles y un larguero. Risas enlatadas sonaban en la cabeza de los más críticos cuando se publicó el once del Barça para recibir al colista sin victorias. Ante las bajas de Pedri y De Jong, Xavi volvía a hacer suplente a Romeu y confiaba en Sergi Roberto para completar el centro del campo. El reusense llegaba al compromiso picado (a su manera) por el runrún sobre su futuro en la entidad. Estos días ha anunciado que le gustaría quedarse un poco más y no pocos aficionados, que entienden que ya no está por competir al máximo nivel, se pusieron las manos en la cabeza. Y, mira por dónde, el capitán más criticado de los últimos tiempos salvó a su equipo (y su entrenador) contra uno de los rivales más flojos que se recuerdan. Los turrones entrarán mucho mejor gracias a dos goles providenciales que estuvieron a punto de ser uno hat-trick. Heavy.

Lo mismo de siempre. Podía ocurrir y acabó pasando contra el poderoso Almería: el Barça supera los tres meses sin ganar ningún partido por más de un gol de diferencia e iguala el récord histórico de la temporada 62-63. Resulta que el "planillo" construido a base de palancas y avales es el más funambulista de la historia de la institución. En el caso concreto del duelo de este miércoles, el sufrimiento se basó en lo mismo que hemos visto en las últimas semanas: fallos imperdonables en defensa ( la primera grave de Iñaki Peña en el 2-2), pocas ideas en ataque (dos de los tres goles azulgranas llegaron a balón parado) y demasiada tendencia a hacer del portero oponente al mejor jugador del partido (5 paradas de mérito). Lewandowski se irá de vacaciones con peor ratio goleador que Joselu, y Raphinha debería entender que no será mejor jugador si marca un gol de rebote y lo celebra tapándose las orejas como respuesta a unos pitos soberanos.

Demasiado caro. Si con Lewandowski el problema va más allá de las bolas que recibe o deja de recibir, con Gündogan da la sensación de que si parece una réplica de Ali Express de lo que sobresalía a las órdenes de Guardiola en el City es debido al desdibujo col que se ha apoderado el Barça de Xavi. Aunque nunca se esconde y siempre deja detalles de calidad, ha pasado de ser un interior impecable en la interpretación de las situaciones y en las entregas a estorbarse con sus compañeros de línea y fallar pasadas impropias. Vino para mitigar la dependencia de Pedri y elevar el nivel en la zona de tres cuartos, pero después de cuatro meses de adaptación ha sido más noticia por animar la resaca del clásico con unas palabras explosivas que por justificar los 20 millones que cobra. Necesita mejorar.

¿En qué quedamos? En torno a Laporta todavía dicen que la plantilla del Barça es mejor que la del año pasado, pero la teoría hace aguas por todas partes. Para empezar, por los números, que son claramente peores que los del curso pasado a estas alturas a pesar de la clasificación para los octavos de la Champions. Y para continuar, por el rendimiento de los fichajes que debían convertir al equipo en un candidato a todo. Si a Gündogan ya le hemos peinado en el anterior apunte, hay que detenerse también en las prestaciones de João Félix, que se abonó a la irregularidad. Lo que no es nuevo para Simeone es una mala noticia para el Barça. Sobre todo si se tiene en cuenta que Laporta no deja de decir que quiere al portugués en propiedad y Xavi, que se lo tragó el último día de mercado, suele cambiarlo. ¿Es éste el "consenso" que nos quiere vender el presidente?

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