Guardiola juega su partido con Eric García
El entrenador del Manchester City, al corriente de las negociaciones entre el Barça y el central catalán
Barcelona"Es uno de mis jugadores favoritos. Ojalá tener 15 como él. Pone buena cara en los buenos y en los malos momentos. Ayuda al entrenador y a los compañeros aunque no juegue. Siempre piensa en el equipo. No ha ido convocado para la final de la Carabao Cup porque creo que fichará por el Barça". Esto es lo que dijo Pep Guardiola sobre Eric García después de ganar su trigésimo título como entrenador. Si bien nadie le preguntó en concreto por el central de Martorell, él quiso destacarlo en medio de una respuesta para elogiar a los futbolistas que menos están jugando últimamente en el conjunto citizen.
García lleva solo 10 partidos y 693 minutos esta temporada. Rivaliza con Nathan Aké y el Kun Agüero para ser el integrante con menos protagonismo de la primera plantilla del actual líder de la Premier. Guardiola justifica su papel residual en el hecho de que acaba contrato en junio y tiene decidido marcharse al Barça, pero al mismo tiempo enumera generosamente sus atributos, que el curso 19/20 le permitieron sumar 25 participaciones y casi 1.900 minutos.
La interpretación más lógica de la situación es que el entrenador da por perdido al jugador y que por este motivo decide promocionar a otros que sí formarán parte de la plantilla del City la campaña que viene. Aun así, en el Barça no tienen tan claro que el mensaje sea tan fácil de descodificar. Fuentes de la negociaciones entre el club azulgrana y Eric García consideran que Guardiola, con estas declaraciones, demuestra que todavía cree que puede seducir al central formado en La Masia para que siga su carrera profesional en Inglaterra.
"Lo presiona con buenas palabras para que renueve", aseguran, porque sabe que el futbolista solo tiene un acuerdo verbal con el Barça, pactado a finales del 2020, y que ahora, después de la llegada de Joan Laporta a la presidencia culé, la propuesta que le hacen desde el Camp Nou es a la baja. Las conversaciones siguen entre las partes y la voluntad de García es volver a casa después de ir a la Eurocopa con la selección española. Pero Guardiola, según interpretan en la mesa de negociación, intenta "jugar su partido" con las dudas del defensa ahora que ve que la apuesta que hacen por él desde la dirección deportiva azulgrana no es tan ambiciosa como hace unos meses.
"Buscamos otras fórmulas con cifras parecidas"
Y es que Laporta mantiene la intención de incorporar al central de Martorell, pero lo quiere hacer a su manera. Por eso ha autorizado a Mateu Alemany para que rehaga la oferta de hace unos meses y la adapte a la cruda realidad de la entidad. "Estamos buscando otra fórmula con cifras parecidas que nos tiene que permitir entrar en la masa salarial del curso que viene", explicaban hace unos días al ARA fuentes azulgranas, que pretenden que García vuelva a poner de su parte para confirmar su regreso. El Barça busca que el futbolista pase de fijos a variables determinados conceptos del acuerdo que tiene apalabrado desde hace meses. La medida daría un margen extra al club para satisfacer otras necesidades de la planificación deportiva, como por ejemplo la llegada de un atacante de primer nivel o las renovaciones estratégicas de Ilaix, Pedri y Ansu Fati, pero también frena el entusiasmo de García, que entiende que ya ha puesto suficientes facilidades para certificar su fichaje.
A pesar de los capítulos habituales de cualquier negociación con tres stakeholders, lo más probable es que Eric García solucione las diferencias que tiene con el Barça y cambie de aires en los próximos meses, y ponga fin de este modo a un serial que dura desde hace más de un año. La tercera ventana de mercado será la vencida con un jugador que llegará al Camp Nou para reforzar la defensa y más concretamente para preparar el relevo de Gerard Piqué. Si el acuerdo se acaba confirmando, García completaría una flota de centrales en la que habrá mayoría de jugadores con pasado en el fútbol formativo azulgrana y de la que caería con toda seguridad Samuel Umtiti, a quien no se descarta entregar la carta de libertad si no se recibe ninguna oferta por él.