Jorge Hinojosa: "No somos los únicos culpables de la ludopatía en España"

BarcelonaSe ha acabado la primera Liga libre de publicidad de casas de apuestas. Así lo marca el decreto que aprobó el gobierno español, que limita los anuncios de este sector a una franja de madrugada y los prohíbe en la mayoría de los principales escaparates, como por ejemplo las camisetas de los equipos de fútbol. Jorge Hinojosa es el director general de la asociación JDigital, una especie de patronal del juego online que representa al 80% de las empresas que se dedican a las apuestas deportivas. El dirigente hace un balance no muy optimista del primer año con la ley en funcionamiento.

Ha pasado casi un año desde la entrada en vigor del real decreto de publicidad en el juego digital. ¿Qué valoración hace del impacto de la medida?

— La publicidad, entendida como promoción de una actividad, es importante. Pero la comunicación comercial tiene más funciones, como por ejemplo hacer entender estrategias de juego seguro y responsable, legalidad de plataformas... Se ha estigmatizado la publicidad como causa de problemas, cuando también tiene potencial para canalizar la demanda hacia las buenas prácticas. El decreto ha causado impacto en nuestra actividad. En el último trimestre del 2021 se ha declarado un 24% de descenso de la actividad en relación con el mismo periodo del 2020.

Es decir, han notado que ya no haya publicidad de apuestas en programas deportivos, retransmisiones y camisetas de equipos.

— Nosotros apostamos por la regulación y el control. Lo que pasa es que la regulación que se ha hecho no ha logrado sus objetivos. Ahora el sector es más vulnerable y proporciona menos garantías al usuario. Y si te fijas, el espacio que ha dejado el juego digital en los patrocinios futbolísticos se lo ha quedado el mundo de las criptomonedas, expuesto igualmente a las adicciones.

¿Qué estrategias siguen ahora las empresas del juego en la búsqueda de nuevos clientes?

— No hay estrategia posible más allá de anunciarse entre la una y las cinco de la madrugada. No hay margen para crecer. Se ha prohibido la comunicación. Solo se puede trabajar en base a datos que ya tienes.

¿Ha habido algún ERTE o ERE en pandemia vinculado a la pérdida de ingresos por los problemas para anunciarse?

— No. El sector ha aguantado. No es un sector débil en cuanto a la empleabilidad. 

Entonces no están tan mal, ¿no? Si el sector aguanta y no ha habido despidos...

— Sí, pero el sector es el que es. No puede crecer más.

¿Ve justo que se anuncien bebidas alcohólicas en el fútbol y no empresas de juego? Por ejemplo, hay una conocida marca de vino que inunda los descansos de los partidos por la tele.

— Renunciamos a pelearnos con otros sectores. Creemos que tendría que haber un marco regulador para todas las prácticas que puedan afectar a población vulnerable, como por ejemplo el juego y el consumo de alcohol. Tampoco nos quejaremos del agravio que supone que puedas ver un anuncio de juego público a cualquier hora del día y, en cambio, ninguno de juego privado. Este es el modelo de desarrollo del país y lo respetamos. Pero vehicular sobre el juego privado todos los problemas de ludopatia y adicciones no se ajusta a la realidad. No somos los únicos que podemos generar problemas. No somos los únicos culpables.

¿No cree, siendo sincero, que era excesiva la publicidad de apuestas deportivas?

— Cuando pasas del 100 al 0 la diferencia es considerable, sí. Pero creo que ha faltado una coherencia global para generar mecanismos de promoción razonables sin llegar a estos extremos de prohibición.

¿Qué coste ha tenido el decreto a nivel fiscal?

— El gobierno ha dejado de recaudar poco más de once millones. No es mucho dinero, puesto que el volumen de negocio del juego digital es muy pequeño. Suponemos el 8% del total del juego en España. La recaudación neta es bastante baja cuando descuentas los premios para los ganadores de las apuestas.

El gobierno quiere aprobar ahora el real decreto del juego responsable. ¿Tienen una aproximación sobre qué se regulará?

— Estamos a favor de evitar malas conductas en población vulnerable, pero será difícil aplicar la normativa si las exigencias son imposibles de cumplir. Por ejemplo, se nos pide una interpretación de la capacidad económica de los usuarios que no podemos conseguir. ¿Tenemos que pedirle la declaración de la renta a la gente? Eso es ir demasiado lejos en materia de protección de datos.

¿Qué proponen desde la asociación para garantizar la seguridad de los consumidores?

— Nos movemos en un terreno tecnológico que nos permite desarrollar mecanismos de seguridad en la verificación de datos, las pasarelas de pago... Podemos decir que en España tenemos un juego bastante seguro.

Sí, pero la seguridad de los jugadores también es evitar que caigan en la ludopatía. En internet todo deja rastro. Y en virtud de este rastro se puede detectar si un usuario se pasa de la raya.

— El juego digital tiene que tener mecanismos para detectar los partidos amañados y también la ludopatia, que no benefician lo más mínimo al sector. No nos interesa la captación de ludópatas. De hecho, la nueva normativa establece límites de gasto para prevenir malas conductas y propiciar un juego libre y a la vez responsable. 

¿Cómo es que hay casas de apuestas que tienen asesores de cuentas VIP, que normalmente pertenecen a millonarios, y en cambio no se asesora gente trabajadora que puede endeudarse gravemente?

— No es un tema de promoción. Aquí tenemos que diferenciar entre población vulnerable y la que no lo es. Que tengas dinero no quiere decir que tengas un problema con el juego.

¿Quiere decir que los ludópatas solo pueden ser pobres?

— Yo hablo de los mecanismos de control que hay en los operadores.

¿Por qué hay más casas de apuestas en barrios de clase baja que en zonas altas?

— Tendría que analizar la legislación que afecta al juego presencial. Es un tema que se regula desde las autonomías. Y no me parece mal.

¿Por qué es divertido apostar? ¿Qué valores tiene?

— Es una cuestión social relacionada con la actividad sobre la cual se apuesta, que mayoritariamente es el deporte, y en concreto el fútbol y el tenis. Promueve los mismos valores que otros juegos: elementos de ocio, entretenimiento y expectativas de ganancia.

El Barça mantiene el patrocinio de 1xBet, una compañía creada por rusos que están en busca y captura por la Interpol y con sede principal en Chipre. En España opera a través de una filial que está en Valencia. ¿Es una empresa honesta?

— Sí, teniendo en cuenta que está recogida en la ordenanza del juego en España. El dominio .es suele ser garantía de legalidad. Pero no vale solo con legislar. Hay que legislar mirando los objetivos. Y estos objetivos no se están cumpliendo. No por prohibir la publicidad evitas que haya empresas que operen de forma irregular. Es conveniente reflexionar si las medidas aprobadas nos ayudan a ser seguros. Si el sector pierde fortaleza, como está pasando, habrá más gente con ganas de hacer negocios ilícitos. 

¿Ese no es un poco el discurso del miedo?

— No. Tenemos evidencias que están proliferando empresas ilegales, a escondidas de empresas que sí que tienen licencia en regla. El problema es querernos extinguir. Y esto no es posible. El juego ha existido toda la vida.