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¿Tiene sentido organizar la Ryder Cup de golf en plena sequía? La Generalitat cree que no

La candidatura para llevar la prestigiosa competición a Girona en el 2031, con el apoyo de todas las instituciones excepto el Govern, afirma que es viable

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BarcelonaLa Ryder Cup de golf, considerada una de las principales competiciones deportivas a nivel internacional, se aleja de tierras catalanas. Después de años de conversaciones para construir un proyecto para acoger la edición de 2031, en las últimas horas el gobierno de la Generalitat ha descartado la construcción del tercer campo de golf reclamado por la organización en las instalaciones del complejo Camiral Golf and Wellness, conocido anteriormente como PGA Cataluña. La puerta cerrada por la Generalitat significa un golpe dura para el proyecto, aunque los diferentes actores que defienden el torneo, privados y públicos, no tiran la toalla y se reunirán próximamente con los organizadores de la Ryder Cup para ver si el proyecto todavía tiene sentido sin este tercer campo.

La Ryder Cup, torneo nacido en 1927 para enfrentar a los mejores jugadores de Estados Unidos y Reino Unido, ha ido evolucionando con el paso de los años. En la actualidad pone cara a cara, cada dos años, a los mejores jugadores de Europa y los mejores estadounidenses. Si un año se juega en Europa, la siguiente edición siempre será en Estados Unidos. El formato del torneo ha hecho que sirva para mover a miles de aficionados a este deporte, por lo que los impulsores del proyecto defienden que dejaría beneficios económicos a Cataluña: cifran en 300.000 los posibles visitantes.

La Ryder está organizada de forma conjunta por los circuitos de golf profesionales de Estados Unidos y Europa, unidos bajo el paraguas de una empresa con el irlandés Guy Kinnings como CEO. Kinnings se había reunido en los últimos meses con el presidente de la Generalitat, Pere Aragonès, y seguirá en contacto con los jefes de la candidatura gerundense.

Desde la Generalitat se duda de si es necesario un nuevo campo de golf en Cataluña, especialmente en plena emergencia climática. Actualmente, en Cataluña hay 38 campos de golf de diferentes tamaños, ya que algunos son grandes, de 18 hoyos, y otros más pequeños. También hay 18 instalaciones más pequeñas de pitch-and-putt. Desde la Federación Catalana de Golf se recuerda la apuesta por utilizar agua regenerada, aunque se admite que la cifra de agua reciclada todavía es inferior al 70%. "Si se organiza Ryder, se haría siguiendo siempre las normas relativas a cuidar el medio ambiente que se han promocionado en los últimos años", dicen desde la candidatura. Sin embargo, el gobierno catalán no lo ha visto claro, y ha citado la emergencia climática como la principal razón para oponerse.

La Ryder Cup, un torneo con tradición

En las últimas semanas, los impulsores del proyecto mantenían conversaciones con la Generalitat. El primer punto de fricción fue la petición para crear una nueva urbanización cerca del golf, con más de 175 chalés de lujo. La negativa del Govern llevó a los organizadores a renunciar a estas obras ya centrarse solo en pedir el permiso y las ayudas para realizar un tercer campo de golf en el PGA Cataluña de Caldes. Actualmente, este campo, propiedad del magnate irlandés Denis O'Brien, ocupa 200 hectáreas con dos campos de golf de 18 hoyos, dos hoteles, apartamentos y otras zonas deportivas.

Pero para poder cumplir con los requisitos de la Ryder Cup, los organizadores consideraban clave un tercer recorrido de 18 hoyos. "Cataluña tiene campos de golf, pero dispersos por el territorio. Para poder organizar un torneo así es necesario un tercer recorrido en Caldes", dicen desde la Federación Catalana de Golf. Pero el Gobierno tampoco lo ha aceptado y ahora habrá que ver si los organizadores de la Ryder Cup consideran a Caldes de Malavella una posible sede del torneo tal y como está ahora.

La idea de llevar la Ryder Cup surgió hace una década, cuando el Patronato de Turismo de Girona y Costa Brava empezó a trabajar con la Federación Catalana de Golf, la UFEC e inversores privados. Inicialmente, se luchó por ser su sede en el 2023, pero la falta de acuerdos provocó que la Ryder escogiera un campo de golf cerca de Roma. Fue la primera vez que se presentó una candidatura catalana. Históricamente, la Ryder Cup siempre se ha realizado en campos británicos, cuando toca jugar en Europa. En 1997, el campo andaluz de Valderrama fue el primero fuera de Estados Unidos y Reino Unido en ser sede de la copa. En 2018 se celebró en Francia y pronto irá a Italia. Desde la Federación Catalana de Golf se cree que si la opción gerundense cae, la Ryder puede acabar en Madrid.

El gobierno central, favorable

La candidatura, de hecho, está respaldada por el gobierno estatal, dispuesto a invertir 96 millones de euros, sea en Cataluña o Madrid. Ahora mismo, sin embargo, la candidatura que parecía en mejor posición para ser la escogida era la catalana, que tiene el apoyo de las federaciones española y catalana de golf, las diputaciones de Barcelona y Girona, el Consejo Comarcal de la Selva, el Ayuntamiento de Caldes de Malavella, así como distintos inversores privados. El propietario del PGA Cataluña, el irlandés Denis O'Brien, anunció su decisión de invertir personalmente 25 millones de euros en la mejora de las instalaciones.

La Federación de Organizaciones Empresariales de Girona (FOEG), la patronal gerundense, ha emitido un comunicado en el que se muestra sorpresa y disconforme con la decisión del Govern y considera que la Generalitat “debería continuar trabajando para encontrar soluciones y no dejar perder este evento deportivo tan importante”. Diferentes representantes del mundo económico y empresarial catalán se reunieron hace unos días en la sede de Foment del Treball para apoyar el manifiesto ¡Salvemos la Ryder! El presidente de Fomento del Trabajo, Josep Sánchez Llibre, afirmó que “sería imperdonable y de grave irresponsabilidad por parte del gobierno de la Generalitat que la Ryder Cup se trasladara a Madrid, cuando la prioridad de los organizadores es Cataluña”.

Por su banda, el presidente de la Federación Catalana de Golf, Ramon Nogué, considera: “La celebración de la Ryder Cup en Cataluña tendría un gran efecto en la economía, ya que atraería visitantes de todo el mundo y aportaría un impacto de más de 1.300 millones de euros en el territorio, así como un millar de puestos de trabajo. Lamentamos la desinformación sobre la cuestión del agua, y más en un contexto tan complicado: pedimos respeto y frenar la demonización que sufre este deporte”. Plataformas de vecinos y partidos como la CUP han recordado que el tercer campo de golf proyectado se haría ocupando un terreno destinado actualmente a la producción agrícola. Según Nogué, los campos de Caldes de Malavella se han regado con agua 100% reciclada desde en 1999, hecho que no ocurre en todos los campos de golf catalanes, aunque la cifra de agua reciclada destinada al golf va creciendo. Según Nogué, un 95% de los campos utilizan agua regenerada no potable, gracias a depuradoras. Y en el caso del Camiral Golf and Wellness, disponen de una depuradora propia en sus instalaciones que regenera el agua que utilizan sus instalaciones. Según la Agencia Catalana del Agua, para regar todos los campos catalanes al año se utiliza la misma cantidad de agua consumida por la ciudad de Barcelona en seis semanas, unos 7,9 hm³ al año. Sin embargo, la Generalitat considera que con el escenario de sequía actual no toca apostar por este proyecto.

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