Macroeconomía

Bruselas valida el plan fiscal de Sánchez para mantener a raya déficit y deuda

La Comisión Europea cree que España fija una senda "creíble para asegurar la sostenibilidad a medio plazo"

MadridEl plan de ajuste del gobierno español para cumplir con las reglas fiscales en los próximos siete años ha convencido a Bruselas. La Comisión Europea ha validado este martes la proyección del ejecutivo de Pedro Sánchez enviada a mediados de octubre para cumplir con los objetivos de reducción del déficit y deuda pública fijados por las instituciones comunitarias. En el Plan Fiscal y Estructural, el Estado se compromete a derribar el déficit a la mitad en los próximos cuatro años. Del 2,5% del producto interior bruto (PIB, el indicador que mide el volumen de una economía) en 2025 a un 1,6% en 2028 (en 2031 se situaría en un 0,8% del PIB) . Bruselas exige que se mantenga por debajo del 3% del PIB, considerado el máximo según las reglas fiscales si los estados miembros de la Unión Europea no quieren exponerse a un expediente sancionador.

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En cuanto a la deuda pública, irá descendiendo del 102,5% del PIB en 2025 hasta el 98,2% en 2028 y caerá en torno al 90% en 2031. En opinión de la Comisión Europea, el gobierno español "fija una senda fiscal creíble para asegurar la sostenibilidad fiscal a medio plazo". Es la primera vez que Bruselas analiza estos planes de ajuste bajo las nuevas reglas fiscales aprobadas hace unos meses después de un período de excepcionalidad y permisividad por la Covid-19. A partir de 2025, acabará la época de la vista gorda y, según destaca el gobierno español, la perspectiva de cumplimiento del Estado con Bruselas es favorable.

"La Comisión ha vuelto a situar a España en el grupo de buenos alumnos, es decir, de los estados miembros que cumplen con las nuevas reglas fiscales europeas, y apoya así la hoja de ruta de inversiones y reformas que sustenta el nuestro modelo de crecimiento equilibrado, sostenible y justo", ha afirmado el ministro de Economía, Carlos Cuerpo, en un comunicado. Cuerpo también reivindica que "España liderará el crecimiento entre las grandes economías europeas" y lo hará "de forma equilibrada".

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En el plano fiscal el Estado prevé que la economía española mantenga el pulso y que crezca un 2,4% en 2025 y un 2,2% en 2026, cifras muy superiores a las que registran actualmente la mayoría de los países de la zona euro. Por último, la Comisión Europea avala la senda de crecimiento del gasto primario neto –lo que no incluye el gasto vinculado a los intereses oa los fondos europeos, entre otras cuestiones– y que el gobierno español sitúa en un 3% de media durante el período 2025 -2031 (un 3,4% hasta 2027).

Previsión de ingresos

Según remarca el gobierno español, en el Plan Fiscal y Estructural figuran "reformas e inversiones" aprobadas en el plan de recuperación cuyo despliegue "incrementará el PIB potencial a lo largo del período de ajuste". Entre ellas, "figura la reciente reforma fiscal aprobada por el Congreso" el jueves de la semana pasada, que acabó aguada, pero que Sánchez logró salvar y que incluye compromisos con la Unión Europea como el nuevo tipo mínimo del 15% para los beneficios de las multinacionales y con las que el Estado prevé ingresar 2.600 millones de euros al año.

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Sin embargo, la previsión detallada en cuanto a los ingresos no se sabrá hasta que el gobierno español presente un plan presupuestario (es el documento que debe acompañar anualmente el Plan Fiscal y Estructural, pero que no estará preparado hasta que haya unos presupuestos generales del Estado). El gobierno español sigue negociando la senda de estabilidad (objetivos de déficit y deuda) con Junts después de que el partido de Carles Puigdemont votara en contra en el Congreso,un trámite que es imprescindible para la elaboración de las cuentas públicas.