Carlos Vilarrubi, el gran compañero de batalla que siempre ha estado a la altura
BarcelonaCarles Vilarrubí ha sido el hermano mayor que no tengo y que, después de hoy, he perdido y nunca más tendré. Ha sido para mí una ilusión, un espejismo, un sueño tenerte.
Nos conocimos hace ya muchos años, en un mundo distinto y con unos parámetros muy distintos. Hemos compartido juntos batallas, sustos, proyectos y, sobre todo, victorias. Él fue siempre un ganador que no tenía miedo a nada, ni a nadie, miraba a todo el mundo en la cara, como ha hecho con la muerte. Ha sido un honor para mí que haya sido mi mentor y yo su alumno.
Carles Vilarrubí ha sido un hombre educado, culto, ilustrado, diplomático, buen amigo, buen anfitrión y, por encima de todo, algo que actualmente no se estila demasiado: ¡fiel a muerte!
Era muy aficionado al cine poco comercial, a ese tipo de cine que te hace pensar. Antes lo llamaban cine de autor. Por eso nunca olvidaré cuando, sorprendentemente, insistió en ir a ver la comercial Top Gun. El viejo instructor, después de un desastroso entrenamiento, abucheaba a los alumnos diciendo: "Aquí no lucha cada uno por su éxito personal, somos un equipo y nunca abandone al compañero, déle siempre cobertura". Ese día sellamos nuestro pacto: no abandones nunca al compañero, aunque no lo ve claro, no permita que abaten al compañero y lo hemos cumplido. No contamos que la vida también dispara.
Al lograr la presidencia de la Academia Catalana de Gastronomía y Nutrición me pidió que estuviera a su lado y obviamente estuve allí. No había opción, nunca se abandona al compañero. Ahora, mientras vuelo solo, cuando la vida le ha abatido, no puedo dejar de pensar en sus valores firmes y en la profundidad de su amistad fiel. Poco antes de que toda esta pesadilla empezara me llamó para ir a ver una película francesa: 13 días, 13 noches sobre la salida de la embajada francesa en Kabul. En la salida comentamos que si nos encontráramos en un momento así nos gustaría estar a la altura.
Él lo estuvo siempre y yo pienso en el cine y en las películas que hemos visto juntos. Me gustaría estar algún día a su altura. Por el momento nos separamos, pero no lo dudes amigo, volveremos a volar juntos.