Los Gallardo, Salvador Illa y una gran reconciliación: Almirall celebra 80 años
La farmacéutica catalana presenta The Hive, un centro de innovación abierto a otras empresas
Barcelona"Bienvenido, bienvenido", dice un sonriente Jorge Gallardo, mientras encaja las manos con Salvador Illa, que abandona por un momento la rigidez institucional. El presidente saluda a otros Gallardo y también a directivos de Almirall, con quien pone ante las cámaras. Se toman una foto y una broma provoca ahora las sonrisas del presidente de la Generalitat y de Carlos Gallardo. Si la sintonía no fuera suficientemente evidente, antes de arrancar el acto, ya dentro del auditorio, los fotógrafos inmortalizan un nuevo susurro. "Paso a paso", dice el presidente a Jorge Gallardo, antes de que sus dos sillas queden separadas por un pasillo.
Esta buena relación la hacía pública minutos después el presidente de la Generalitat desde el atril, durante el acto institucional para conmemorar los 80 años de esta farmacéutica catalana dedicada a la dermatología, que ha tenido lugar en el centro de I+D de Almirall a Sant Feliu de Llobregat. El acto de celebración, que ha contado con los pesos pesados que han hecho crecer a la compañía, como los hermanos Antonio y Jorge Gallardo, y el hijo del segundo, Carlos Gallardo, presidente y consejero delegado desde 2022 —después de que su padre le cediera la presidencia del grupo, que ostentaba desde 1988—, también ha sido un acto de reconciliación.
"Es la segunda vez que visito la planta. En ese mismo espacio, cuando era ministro de Sanidad, pude disfrutar de conversaciones pausadas con Jorge Gallardo, que me sirvieron en muchos niveles y supusieron un enriquecimiento personal. Cuando las cosas se hacen bueno lo que debemos desear es que duren", decía Illa, que también aprovechaba para generar complicidades con Carlos Gallardo, con quien al bajarse del coche ha compartido cuatro palabras de presentación. El hecho es que esta sintonía entre la Generalitat y la farmacéutica llevaba años sin verse: en el 2015 Jorge Gallardo envió un videocomunicado a sus empleados sobre los riesgos de una independencia unilateral. Ahora, una década después, con caras nuevas a ambos lados, la sintonía es absoluta.
De hecho, ha sido Carlos Gallardo, la única voz de la familia en el consejo de administración, quien ha lanzado el primer mensaje en este sentido. En su intervención, ha dicho que en el actual contexto de competitividad, su deber es continuar construyendo sobre las bases de la ciencia de la salud y la industria farmacéutica, algo que sólo conseguirán, ha dicho, "con el apoyo de un entorno político y legislativo favorable que le proteja y le favorezca". Poco después, a su vez, Illa ha recogido el guante: "Intentamos favorecer que haya muchos Almiralls, primero generando estabilidad con un entorno predecible, ni dando trompicones ni golpes de volante, y, segundo, intentando hacer infraestructuras adecuadas, con buena conectividad".
El presidente de la Generalitat ha pasado momentáneamente al castellano para afirmar que "no hay verdades alternativas", sino verdades y mentiras. "Esto, aplicado al mundo de la salud, genera grandes desastres", advirtió, y reivindicó la industria farmacéutica. Almirall, que ha invertido 1.000 millones de euros en I+D en los últimos 10 años, ha aprovechado la celebración para presentar a The Hive, un centro de innovación abierto a otras empresas.
Durante el acto, también han intervenido la directora general d'Almirall Iberia, Lidia Martín; el secretario de estado de Ciencia e Innovación y Universidades, Juan Cruz; la alcaldesa de Sant Feliu de Llobregat, Lourdes Borrell, y la farmacóloga María José Alonso Fernández. Al final del acto, antes de abandonar el atril, Illa desvanecía todas las dudas: "Hoy tenía muchas cosas que hacer, pero cuando me llamó Carlos no dudé en venir a acompañaros aquí".