España aumenta la productividad y reduce la brecha con Europa, según el Banco de España
Un informe del organismo monetario apunta a que tres de cada cuatro nuevos trabajos son ocupados por inmigrantes
BarcelonaLa productividad crece en España. Así lo constata el informe anual para 2024 que ha publicado este martes el Banco de España, en el que señala que la economía española está cerrando la brecha productiva con las principales economías de Europa, un elemento considerado como una de las principales asignaturas pendientes del Estado en materia económica. La buena marcha de la actividad económica explica en los últimos años las mejoras productivas, pero el organismo no apunta si son estructurales y se mantendrán a largo plazo o si se trata de un fenómeno temporal.
La economía española es, desde hace dos años, la que más crece entre las grandes de la Unión Europea. Esto ha permitido, pues, que España acorte las distancias en diversos ámbitos con el resto de Europa, sobre todo los países del entorno más inmediato, como Francia, Alemania, Italia, Países Bajos o Bélgica. Uno de estos elementos, según el informe del Banco de España, es la productividad, que pese a ser un concepto abstracto para la mayoría de ciudadanos, tiene mucha importancia a ojos de los economistas ya la hora de elaborar políticas públicas.
La productividad es la eficiencia a la hora de producir. Es decir, una empresa es más productiva si puede producir más con menos. Igualmente, será de aplicación a trabajadores oa todo tipo de activos, tales como máquinas o vehículos. Es un concepto que, además, está muy ligado al desarrollo de los países: cuanto mayor sea la productividad de los trabajadores de un país, más altos suelen ser sus sueldos. E igualmente, cuanto más productivas son sus empresas, más elaborados y caros serán sus productos o servicios. Por tanto, los avances en productividad enriquecen a los países ya la gente que vive allí.
"Las ganancias de productividad registradas en la economía española en los últimos años han permitido reducir la brecha negativa acumulada a lo largo de las últimas décadas" respecto al resto de la zona euro, indica el documento. Sin embargo, la diferencia de productividad entre España y las principales economías de Europa sigue siendo "significativa" y "reducirla representa uno de los mayores retos a los que se enfrenta la economía española de cara al futuro".
Mejoras generales
Así, el Banco de España ha detectado un "repunte reciente de la productividad" en el Estado en 2024, que contrasta con la situación en el resto del continente. Así, la productividad por trabajador creció el pasado año un 1,4% en España, mientras que en los estados que comparten el euro cayó, de media, un 0,7% (en Alemania, la primera economía de Europa, la reducción fue aún mayor, del 1,3%). Por hora trabajada, la productividad subió un 2,1% en el Estado y un magro 0,1% en la zona euro. Una situación similar se produjo con la productividad del capital (los activos de las empresas, desde maquinaria hasta vehículos, pasando por programas informáticos o patentes), que disminuyó un 0,5% en la zona euro mientras que en España incrementó un destacable 2,5% en un año, y la productividad total de los factores (una medida de eficiencia productiva entre trabajo y capital) 0,9% en la eurozona.
El Banco de España apunta a que esta mejora generalizada de la productividad puede ser tanto fruto de factores temporales como de un hipotético cambio más profundo en el modelo productivo que empieza a detectarse de forma incipiente. Entre los factores "estructurales" –es decir, de cambio de paradigma– se encuentran la innovación, el capital humano y la calidad de las instituciones. Sobre el primero, "España presenta una posición alejada de los países" del entorno, aunque el déficit comparativo con la Unión Europea se ha "reducido" desde la pandemia. Por tanto, aunque todavía se encuentra lejos de los niveles esperados para una economía como la española, la innovación en el Estado ha mejorado recientemente, lo que podría explicar parte de los incrementos de productividad.
Sobre el capital humano, el informe también encuentra aumentos: "Según los resultados obtenidos en exámenes estandarizados a escala internacional sobre las competencias de la población adulta, se ha producido una cierta mejora en el período más reciente", sobre todo concentrados en "grupos de población con menor nivel educativo". Por último, la calidad de las instituciones –que incluye administraciones y servicios públicos, pero también la calidad de las leyes que regulan la economía, la política y la sociedad en un país– han experimentado un "deterioro" en lo que llevamos de siglo, al igual que la eficiencia del sector público.
Otro elemento a tener en cuenta es que la inversión empresarial ha crecido, lo que tradicionalmente favorece la productividad. Esta subida inversora se debe a que "hogares y empresas españolas presentan ratios de endeudamiento en valores cercanos al mínimo de las últimas décadas". Estos niveles bajos de deuda, junto con la caída del coste de los préstamos (fruto de las rebajas de los tipos de interés aprobadas por el Banco Central Europeo en el último año) facilitan que muchas compañías puedan utilizar créditos para mejorar su capacidad productiva con nuevas instalaciones, renovando softwares o maquinaria, o dedicando más dinero a investigación.
Trabajos ocupados sobre todo por inmigrantes
El informe destaca la fortaleza del mercado laboral y la reducción "notable" durante el pasado año y los primeros meses de este año tanto de la tasa de paro como de la tasa de temporalidad, mientras que el número de cotizantes a la Seguridad Social ha crecido gracias a la creación de nuevos trabajos. Ahora bien, el documento señala que esta expansión del mercado de trabajo se ha producido en buena parte gracias al aumento de la población extranjera residente en España: "En los últimos años la ocupación ha estado particularmente concentrada en la población inmigrante", señala el documento, que añade que, entre finales de 2019 y finales de 2024, en torno a un empleo en 76% el extranjero. Esta entrada de mano de obra de fuera del Estado ha permitido "satisfacer la mayor demanda de empleo de los sectores con mayores dificultades" para encontrar empleados.
Sobre la escasez de trabajadores, el Banco de España ha constatado que "desde finales de 2022 se ha producido un aumento significativo del porcentaje de empresas que declaran dificultades para encontrar mano de obra", en especial en la construcción y la hostelería, dos de los pilares del empleo y de la actividad económica en el X de los críticos con el actual modelo económico por la precariedad laboral y la baja productividad. Sin embargo, el informe no aclara si estas dificultades de los empresarios de estos dos sectores para contratar a nuevos empleados se debe a "la situación cíclica de la economía" –es decir, a un hecho puntual que se corregirá con la entrada de nuevos trabajadores en el mercado laboral, sean locales o extranjeros– o si hay "un desacoplamiento de naturaleza más trabajadores a las de habilidades de las habilidades".