La Fed pone fin a la crisis de los precios y baja los tipos 0,5 puntos
El banco central estadounidense prevé hacer más recortes antes de que acabe el año
WashingtonLa Reserva Federal puso fin al estancamiento de los tipos de interés y bajó 0,5 puntos el precio del dinero. Hasta ahora la horquilla del precio del dinero se había mantenido entre el 5,25% y el 5,5%, la más alta en más de 20 años, pasando ahora a estar entre el 4,75% y el 5%. Se trata del primer recorte que el organismo hace desde el 2020, cuando a raíz de la pandemia la inflación se disparó y la Fed subió los tipos para encarecer el precio del dinero y enfriar la economía. El banco central estadounidense prevé más recortes de los tipos antes de que acabe el año, hasta dejarlos entre el 4,25% y el 4,5%.
El objetivo de conseguir bajar la inflación hasta el 2% es el principal motivo por el que Jerome Powell ha ido posponiendo reunión tras reunión un recorte que ya se esperaba en lo que va de año. No fue hasta agosto cuando la inflación alcanzó el 2,5% y rompía la barrera del 3% donde parecía estar atascada desde hacía meses.
"La inflación se desplaza de forma sostenible hacia el 2%, ya que ha disminuido y el mercado laboral se ha enfriado", ha expuesto Powell en la rueda de prensa de este miércoles. "Los riesgos al alza para la inflación han disminuido y los riesgos a la baja para el empleo han aumentado. Ahora vemos un equilibrio entre los riesgos para alcanzar nuestros objetivos de empleo y de inflación", aseguró .
La bajada de tipos de la Fed se produce en un contexto agridulce para la economía norteamericana: se pone fin a la crisis de precios con una inflación que parece que empieza a estar controlada, pero el mercado laboral estadounidense hace dos meses que presenta cifras preocupantes. En julio se registró la tasa de paro más alta de los últimos tres años, con un 4,3%, y la creación de sólo 114.000 empleos (mucho menos de lo esperado).
La cifra de desempleo en agosto mejoró algo y se situó en el 4,2%, pero los datos de empleo, aunque remontaron, seguían por debajo de los esperados por los economistas. Todo ello indica un enfriamiento del mercado laboral, una de las primeras señales de una posible recesión económica. Aún así, Powell ha asegurado que "los recientes indicadores sugieren que la actividad económica ha seguido creciendo con un ritmo constante".
El pánico que vivieron los mercados en el mes de agosto, con la caída de los índices bursátiles, en parte respondía a esta ralentización del mercado laboral. En ese momento muchos inversores y economistas señalaban al banco central estadounidense como el culpable de la ralentización de la economía en relación a los malos datos del paro, y ponían todas las expectativas sobre la reunión de este mes de septiembre para calmar el malestar: bajar tipos es una manera de reactivar la economía y los mercados respiran más tranquilos cuando ven que la Fed toma cartas en el asunto. "Este ajuste de nuestra política monetaria ayudará a mantener la fuerza de la economía y del mercado laboral, y seguirá permitiendo un progreso adicional en la inflación", defendió Powell respecto a la agresiva bajada del 0,5%.
El mercado inmobiliario estadounidense será el primero en notar los efectos de la bajada de los tipos de interés, especialmente los que tengan una hipoteca. Aunque no se producirá de forma inmediata, sí ayudará a que más personas puedan acceder a la vivienda o puedan pedir una hipoteca para conseguirla. Sin embargo, uno de los principales motivos por los que el mercado de la vivienda está tensado es por la dificultad para encontrar casas.
La bajada de tipos no solo supone un estímulo para la economía estadounidense en un momento en el que se esperaba que la Fed actuara, sino que tiene implicaciones internacionales. El dólar es la principal divisa de referencia y el recorte de la Fed contribuye a relajar las condiciones financieras globales, tendencia que ya habían iniciado otros bancos centrales, como el Banco Central Europeo (BCE).
El adelanto del BCE
El banco central estadounidense ha bajado los tipos tres meses después de que lo hiciera el Banco Central Europeo, algo que raramente se ve, ya que normalmente el BCE va a remolque de la Fed. Cuando el BCE anunció su bajón de tipos de interés hizo un recorte de 0,25 puntos, pasando del 4,5% hasta el 4,25%. El organismo europeo también se ha fijado como objetivo reducir la inflación hasta el 2%, una cifra que tampoco había alcanzado por completo cuando hizo la bajada de tipos. La presidenta del supervisor bancario, Christine Lagarde, avisó durante la reunión de junio que la inflación seguiría por encima del objetivo hasta bien avanzado el próximo año.