La viciada atmósfera madrileña y la incongruencia de Feijóo
La política española hace ya tiempo que se ha convertido en un estanque de aguas pantanosas donde es imposible tener un debate civilizado y el insulto y el intercambio de acusaciones gravísimas son nuestro pan de cada día. Las supuestas tramas de corrupción se agolpan una sobre la otra hasta que ya no es posible distinguir el grano de la paja y se necesita un GPS para orientarse. Madrid siempre ha sido la ciudad de los dossieres y los audios, de las conspiraciones y las turbias maniobras, pero ahora realmente el ambiente se ha convertido en irrespirable y los titulares de los medios que tienen su sede son a menudo indescifrables para el común de la gente.
Y en esa atmósfera viciada y enrarecida hay una figura que resulta completamente extemporánea, la del presidente del PP, Alberto Núñez Feijóo. Así como Isabel Díaz Ayuso está como el pez en el agua, Feijóo no acaba de encontrar ni el tono ni la línea política. Este jueves, sin ir más lejos, ha insistido en calificar al presidente del gobierno español, Pedro Sánchez, de "capo" de una supuesta mafia a raíz de los vídeos que implican a una militante socialista en una supuesta trama para desprestigiar a la UCO, la unidad de la Guardia Civil que investiga Begoña Gómez.
Pues bien, si de verdad se creyera lo que dice, Feijóo debería ser consecuente y presentar una moción de censura, aunque la pierda, porque sería la única respuesta posible casi podríamos decir por responsabilidad institucional. En cambio, al no tener los votos ni argumentos para convencer a nadie más allá de Vox, Feijóo ha decidido convocar una manifestación en Madrid el domingo 8 de junio, es decir, exactamente lo mismo que ya hizo en su día contra la amnistía con un resultado modesto. Feijóo opta por agitar la calle en lugar de asumir su responsabilidad, que es la de ofrecer al Congreso una alternativa y enfrentarse cara a cara con Sánchez. ¿Será porque sabe que el PP también tiene muertos en el armario, como el presunto fraude fiscal de la pareja de Ayuso o el reciente encarcelamiento del que fue número dos de Jorge Fernández Díaz en Interior? Por no hablar de las maniobras del PP valenciano para desacreditar a la juez que investiga a la DANA y la vergonzosa continuidad de Mazón en el cargo.
El PP simplemente aplica la plantilla del "¡Váyase, señor González!" de José María Aznar, la de la estrategia de la crispación alimentada desde las redacciones de determinados medios que conspiraron entre 1993 y 1996 para derribar al gobierno socialista. La diferencia es que Aznar no tenía a nadie a su derecha y era un líder indiscutido, mientras que Feijóo tiene Vox fuera y Ayuso dentro de él. trata es de enterrar el sanchismo y, como dice Abascal, encarcelar al presidente español
¿Es esto, lo que quiere Feijóo? engullido.
