Bienestar

Yoga facial: ¿sirve realmente para rejuvenecer el rostro?

Descubrimos en qué consiste esta técnica, que promete una piel radiante con ejercicios muy asequibles

3 min
Una mujer toca la cara en una imagen de recurso.

BarcelonaLas redes van llenas, muchas influencers aseguran que practicarlo les ha cambiado la vida y los videotutoriales son seguidos por miles de personas. Hablamos del fenómeno del yoga facial, una técnica de ejercicios para el cuello y los músculos de la cara que, según las expertas, si la practicas durante diez minutos cada día te permite rejuvenecer la piel del rostro e, incluso, reducir ansiedad. Y todo esto sin salir de casa ni gastar dinero.

No es de extrañar, pues, que esta tendencia tenga tantas seguidoras. Entre ellas destacan celebrities como Karlie Kloss, Gwyneth Paltrow, Jennifer Aniston, Madonna o incluso Meghan Markle. Todas ellas han explicado los beneficios que les aporta el yoga facial y cómo les ha cambiado la vida y sus rutinas de belleza.

Detrás de este fenómeno hay influencers como la inglesa Danielle Collins y la japonesa Fumiko Takatsu, que han creado sus propios métodos y que triunfan en la red con cursos y videotutoriales seguidos por personas de todo el mundo. En el Estado una de las pioneras fue María Garrigues Walker, que en 2007 abrió el centro Walker Nine en Madrid, donde diseñó una serie de ejercicios faciales combinados con técnicas de relajación y respiración. Entonces era un método muy minoritario. Nada que ver con el fenómeno que está hoy en las redes.

Antienvejecimiento natural

Pero, ¿en qué consiste exactamente el yoga facial? “Es yoga, pero en vez de ejercitar los músculos del cuerpo se ejercitan los de la cara”, explica Lucia Liencres, profesora de yoga en The Class Yoga. De esta forma, se realizan una serie de estiramientos y ejercicios para tonificar la cara y masajear faciales antiarrugas que fortalecen y aportan elasticidad a todos los músculos del rostro. Según las instructoras que promueven el yoga facial, con estos estiramientos no sólo puede evitarse tener que recurrir a tratamientos más agresivos, como el bótox, sino que también contribuyen a liberar el estrés ya reducir la ansiedad.

A diferencia de sus inicios, hoy no es necesario asistir a ninguna clase presencial para poder aprender los ejercicios de yoga facial. Expertas como Francesca Garrigues ofrecen en la red muchos vídeos para poder realizar los estiramientos desde casa. "Lo ideal es hacerlo una vez al día, alrededor de unos cinco días a la semana, o condensarlo durante el fin de semana, si entonces tienes más tiempo", explica Garrigues, que también es instructora en The Yoga Class. "Lo mejor es hacerlo a primera hora de la mañana para despertar los músculos del rostro y tener más conciencia de los movimientos que harás durante el día, o por la noche antes de ir a dormir", continúa.

Aval médico

Pero todas estas ventajas están muy bien, ¿qué opina el sector médico sobre el yoga facial? "Tiene su función", asegura la doctora Ana Margarita Torres, presidenta de la Sociedad Catalana de Cirugía Plástica Reparadora y Estética. “Igual que hacemos yoga con el cuerpo, también podemos hacer yoga con la cara. Muchas veces no nos damos cuenta, y la postura que hacemos con el cuerpo, como el tórax o los brazos, influye mucho en el cuello y el rostro”, asegura Torres, que remarca cómo, sólo relajando la zona, ya mejora mucho expresión facial.

“Hay mucha gente que por la noche hace bruxismo, que aprieta la mandíbula, y le viene bien hacer ejercicios como el yoga facial, porque le mejora la parte superior del tronco”, continúa. Por tanto, ella recomienda estos ejercicios, sobre todo para las personas que tienen mucha tensión en su día a día. "A veces sólo tres o cuatro minutos para estirar un poco los músculos agarrotados te pueden ayudar a dejar de sentir esa tensión y también te pueden ayudar a la hora de acostarse de forma más relajada", asegura.

Eso sí, la doctora también añade que realizar los estiramientos es un complemento ideal para un tratamiento antiedad, pero que no lo es todo. "También necesitaremos cremas para la piel, porque no se hidrata sólo haciendo ejercicio", remarca. "Siempre depende de cada persona, pero aparte de los estiramientos y las cremas quizás también se necesite algún tratamiento más en profundidad si, por ejemplo, hay alguna arruga más marcada que no se quiera ver", concluye. Es decir, milagros sí, pero hasta cierto punto.

7 ejercicios de yoga facial para hacer en casa (o donde quieras)
  • Arrugas del frente

    Pon los dedos en el centro de la frente y desplazalos hacia los laterales suavemente. Realiza tres repeticiones. Este movimiento hace que se mejore la circulación y se incrementen los niveles de colágeno, que aportan elasticidad a la piel y le ayudan a tonificar. Además contribuye a reducir la tensión acumulada.

  • Cuello tonificado

    Con postura firme y mirando hacia delante, gira el rostro hacia un lado, como si quisieras mirar por detrás del hombro, hasta que quede alineada con ésta. Entonces desplaza el rostro hacia atrás y mantén la posición entre seis y ocho segundos. Luego haz lo mismo hacia el lado contrario y no pares hasta que hayas realizado tres repeticiones a cada lado.

  • Línea de los ojos

    Cierra los ojos fuerte y luego abre todo lo que puedas, como si estuvieras sorprendido. Posteriormente vuelve a la posición normal de los ojos y repite lo mismo unas diez o quince veces.

  • Bolsas de los ojos

    Con los dedos haz la forma “V” y colócalos sobre los dos ojos, haciendo un poco de presión. Mira hacia arriba y cierra un poco los ojos. A continuación, déjalos relajados. Haz seis repeticiones y, al terminar, ciérralos con fuerza durante diez segundos.

  • Zona de la boca, comisuras y labio superior

    Sonríe como si estuvieras muy contento. A continuación, estrecha los labios como si quisieras besar a alguien para, finalmente, relajar el rostro y respirar. Vuelve a repetirlo como si soplaras aire por la boca en 20 o 25 respiraciones. Con este ejercicio se relajan los músculos de boca y mejillas.

  • Piel luminosa

    Con el dedo índice y el pulgar, aprieta con suavidad todas las mejillas durante treinta segundos. Este estiramiento mejora la circulación y aporta luminosidad a la piel.

  • Rostro relajado

    Un ejercicio ideal para finalizar la rutina de yoga facial es golpear con suavidad todo el rostro con las puntas de los dedos. Seguidamente, frota las manos para generar calor y ponlas encima de los ojos cerrados. Respira profundamente y relaja los músculos del rostro.


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