Rocío Carrasco detalla episodios de malos tratos físicos y psicológicos cuando estaba embarazada
En la emisión de este domingo intervino un testigo que corrobora la violencia física que sufría Carrasco
BarcelonaLa emisión de los episodios 2 y 3 de la docuserie Rocío Carrasco, contar la verdad para seguir viva ha reafirmado este domingo por la noche la posición pública como mujer maltratada de la hija de Rocío Jurado, que la semana pasada ya conmovió a España con su penetrante testimonio. En los capítulos de esta madrugada, Carrasco ha explicado nuevos episodios de supuestos malos tratos de su exmarido, Antonio David Flores, hacia ella antes de separarse. Tanto físicos como psicológicos.
Los más recurrentes que se han dado a conocer en la emisión de hoy son los que se pueden ubicar en la categoría de lo que se conoce como luz de gas. Según el testimonio de la víctima, cuando estaba embarazada del segundo hijo de la pareja, Flores habría empezado una relación extramatrimonial con una camarera llamada Sonsoles. Durante el proceso en el que Carrasco iba descubriendo pruebas de aquella relación paralela del que era su marido, él habría intentado aplicarle esta estrategia de maltrato psicológico, muy difícil de demostrar judicialmente y consistente en hacerle creer a la víctima que tiene una percepción distorsionada de la realidad.
En este sentido, Carrasco explica que, cuando ella indagaba o se quejaba de la relación extramatrimonial de él, Flores le decía de manera recurrente frases como: "Estás loca", "Ves cosas que no existen", "El embarazo te está alterando las hormonas" o "Tú no estás bien de la cabeza". La víctima dice que este tipo de ataques llegaron a tener lugar incluso en una ocasión en la que ella vio directamente que él besuqueaba a su amante en un bar nocturno. Según Carrasco, él lo negó y lo atribuyó al mal estado mental de ella. En esa ocasión –durante la que hay que recordar que ella estaba embarazada del segundo hijo de la pareja–, dice que sufrió un ataque de pánico y que, en los meses siguientes y fruto del hecho de que el comportamiento de Flores seguía en estos términos, sufrió repetidamente ataques de ansiedad y de pánico. De hecho, a raíz de esto, ella explica que Flores le decía recurrentemente que "malpariría a su hijo".
"Me empezó a doler la barriga y empecé a tener punzadas, como si fueran contracciones", recuerda en el reportaje sobre la ocasión en la que pilló a su entonces marido con la amante. "A mí ese ataque de pánico no me cogió porque mi marido me estuviera poniendo los cuernos, me cogió como madre, porque yo estaba embarazada de él, y él estaba utilizando ese embarazo para decirme que estaba loca y que lo que estaba viendo no era real. Entré en pánico, empecé a llorar y a decirle que quería irme a casa. Y me dijo: «¿Quieres ir a casa? Yo no te llevo, ve andando»'", recuerda de ese episodio.
Nuevas agresiones físicas
En la emisión de este domingo, Rocío Carrasco también ha detallado un episodio de maltrato físico que él habría ejercido sobre ella durante un verano en la localidad de Chipiona, en Cádiz, donde solían veranear. Según su testimonio, en el decurso de una discusión derivada de la infidelidad incesante de él, Flores la habría cogido del camisón y –estando embarazada– le habría abocado medio cuerpo por la ventana de un primer piso. "Procura que cuando llegue abajo me haya matado", dice que le dijo ella mientras tenía medio cuerpo fuera de la ventana. "Entonces me soltó rápidamente y entré en la habitación", añade.
Flores anunció en una entrevista remunerada en un medio del corazón que este episodio, que ya había sido filtrado, no era cierto, porque la ventana en cuestión tiene una reja. Carrasco aportó documentación en el documental que demuestra que en el momento de los hechos ahí no había ningún elemento metálico. En la edición anterior de la docuserie, Carrasco ya hizo públicos episodios de malos tratos físicos por parte de su esmarido.
Testimonio de los maltratos
Fuera de la docuserie pero dentro del programa de Telecinco en la que se emitía, apareció un paparazzi histórico de la prensa española llamado Antonio Martín y conocido en el gremio como Chori que aseguró que cuando la pareja estaba casada presenció malos tratos de Flores hacia Carrasco. Martín, que tenía una buena relación con la familia de ella, dice que presenció una bofetada de él en un lugar público de Barcelona al que habían acudido para hacer rehabilitación después de un accidente que había tenido ella.
"Le dio una bofetada, cogió la puerta y se marchó", sintetizaba el testimonio de los hechos, que se arrepiente "de no haber actuado en ese momento". "Después del golpe, Rocío Carrasco se quedó descolocada totalmente. Yo tenía con ella demasiada confianza como para que sintiera vergüenza porque yo estuviera delante, simplemente se quedó callada", concluye el fotógrafo, que dice que lo explica ahora porque se lo "debe" a Rocío Jurado.