El 80% de los migrantes africanos se quedan en África

BarcelonaLas terroríficas imágenes de hombres, mujeres y criaturas a punto de ahogarse en el Mediterráneo y el discurso político de los gobiernos y la ultraderecha respaldan una mentira: “Europa es el destino de un éxodo de migrantes africanos que huyen desesperadamente del hambre y la guerra y que llegan ilegalmente, en un flujo masivo que amenaza nuestro bienestar y nuestro estilo de vida”. Es sobre este marco, falso, que se justifican las vallas en las fronteras y las trabas a los recién llegados en las diferentes legislaciones europeas. Pero los datos desmienten esta percepción: el 80% de migrantes africanos no tienen ninguna intención de salir de África, sino que se mueven dentro del continente y, por tanto, a través de fronteras terrestres y no marítimas.

Suráfrica, por su dinamismo económico, es su principal polo de atracción. Nos lo recordaba la semana pasada la muerte de una ochenta migrantes en un edificio patera en Johannesburgo. El segundo hub económico es Costa de Marfil, una de las economías más consolidadas del continente, con índices de crecimiento anual del 8% desde 2012: Abiyán es el Dorado de África occidental, ya pesar de sus episodios de inestabilidad y la pandemia, ofrece muchas oportunidades laborales en la agricultura (cacao y caucho), la construcción, los servicios y todo tipo de trabajos domésticos. Asimismo cada año entre 10.000 y 15.000 jóvenes marfileños emigran hacia Europa.

“Las fronteras coloniales se dibujaron de forma arbitraria, separando a las comunidades. Han creado países con diferentes nombres, pero no han cambiado las relaciones que había antes. Por eso encontramos muchos movimientos transfronterizos por el comercio, el trabajo estacional o los vínculos familiares”, explica a la ARA Wendy Williams, investigadora del Africa Center for Strategic Studies, con sede en Washington. “Además, en África se han creado comunidades económicas regionales, como la CEDEAO, con libertad de movimiento, como el espacio Schengen en Europa”, añade.

40 millones de migrantes africanos

Según Naciones Unidas en el mundo hay unos 40,2 millones de emigrantes africanos y sólo el 26% viven en Europa (dato del 2020, el último disponible). Y no todos los que viven allí han emigrado: también se cuentan los hijos de los migrantes que no han podido tener la nacionalidad del país europeo en el que han nacido. Más datos que no encajan con el discurso dominante: de todos los migrantes del planeta, sólo el 14,5% provienen de África, menos que Europa, origen del 22,5% de los migrantes del mundo.

Como precisa Williams, lo que explica los movimientos migratorios no son las condiciones que se ofrecen a su llegada, sino los factores de expulsión: económicos, demográficos o ambientales. “Todo esto alimenta la emigración económica. Y en cuanto a la elección del lugar al que ir, la mayoría de la gente se basa en la experiencia de sus conocidos, en la seguridad, en la estabilidad y en las oportunidades para ganarse la vida. Por eso, la mayoría de migrantes no se marchan muy lejos de casa”.