Borrell: "Las sanciones a Rusia tienen un coste, los precios subirán y lo pagarán los consumidores"
El jefe de la diplomacia europea avisa que hay que reducir lo antes posible la dependencia europea del gas y el petróleo rusos
Las duras sanciones que Occidente está imponiendo a Rusia ante la guerra que ha iniciado en Ucrania tendrán un precio también para los ciudadanos, en particular para los europeos. Se trata de "realismo", ha dicho el jefe de la diplomacia europea, Josep Borrell, aue ha sido claro y crudo en su advertencia: "Las sanciones tienen un coste y es mejor que se lo expliquemos a la opinión pública". Hasta ahora Occidente, con la UE al frente, ha aprobado una serie de represalias económicas que inevitablemente repercutirán negativamente a Europa, pero el temor se centra en las que llegarán cuando el conflicto se traslade aún con mayor fuerza a los recursos energéticos porque la Unión es fuertemente dependiente del gas y el petróleo rusos.
"La energía no quedará fuera de este conflicto, debemos rebajar la dependencia del petróleo y el gas rusos lo antes posible, es una política existencial", ha avisado el exministro español en una dura comparecencia después de reunirse con los ministros de Defensa de la UE en que ha asegurado que Europa se encuentra en un momento decisivo de cambio en lo que respecta a sus relaciones con Rusia. "Los precios subirán y los pagarán los consumidores, pero debemos estar preparados. No creáis que podemos hacer todo lo que debemos hacer sin consecuencias, mirad las consecuencias que están pagando los ucranianos", ha advertido el jefe de la diplomacia comunitaria.
Esta dependencia del gas ruso tiene a Europa maniatada a la hora de relacionarse con Rusia: "Pagamos una factura muy alta a Putin en gas y petróleo y el dinero se está utilizando para financiar esta agresión brutal", ha lamentado Borrell. Por eso, aunque la medida no se excluye, todavía no se ha dejado de comprar gas a Moscú. Bruselas insiste en que todas las opciones están sobre la mesa, pero por ahora no se ha atrevido a pulsar este botón.
Con este objetivo se han reunido también este lunes de emergencia los ministros de Energía de la Unión Europea. Antes de que Putin empezara el ataque a Ucrania, la Unión Europea ya empezó a buscar alternativas al suministro ruso, a través de contactos con Qatar, Estados Unidos, Azerbaiyán o Australia. La presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, ha repetido tras varias veces que este invierno está "asegurado", pero Bruselas admite que urge encontrar alternativas, acelerar la transición verde y caminar hacia un aumento de la autosuficiencia europea.
España es uno de los países europeos que más ha insistido en esta línea porque el aumento del precio del gas es una de las principales causas de la subida del precio de la luz que el Estado ha sufrido con especial intensidad. Por eso, a su llegada a la reunión de ministros del ramo, la vicepresidenta del gobierno español Teresa Ribera ha reconocido que, si bien "no podemos prescindir del gas ruso de un día para otro", Europa puede "diversificar" su dependencia energética de cara al próximo otoño. Bruselas debía presentar una propuesta sobre el mercado eléctrico y del gas esta semana que se está aplazando justamente porque se intenta abordar esta cuestión. También España propuso una compra conjunta de gas y la creación de una reserva estratégica para situaciones como esta, opciones que Bruselas no veía claras, pero que han ido ganando peso a medida que se agravaba la situación.
La energía se ha convertido en un elemento central del conflicto y otra prueba es que los ministros de Energía también han debatido este lunes la aceleración de la integración de Ucrania en la red eléctrica europea, sincronización que se extenderá a Moldavia también, uno de los países que más preocupan ante la posibilidad de que Putin quiera ir más allá de Ucrania. "Sería enormemente importante para reforzar la resistencia de estos países", dijeron fuentes europeas.
Venta y suministro de armas a Ucrania
En el resto de frentes, sin embargo, Europa sí que ha ido casi tan lejos como podría. La Unión Europea ha acordado por primera vez financiar armas con 500 millones de euros que se suministrarán a Ucrania por vías que Borrell no quiso detallar: "Estamos en guerra, estoy seguro de que Putin estaría muy contento de saber estos detalles", respondió el jefe de la diplomacia europea cuando le han preguntado cómo la Unión haría llegar los recursos militares al ejército del país que resiste la invasión rusa desde hace cuatro días. Por todo ello, Borrell ha querido poner en valor la unidad y contundencia de una Unión Europea que ha subido el tono y tomando el liderazgo del bloque occidental a la hora de tomar medidas contra Putin. "No solo se trata de defender a Ucrania, se trata de nuestra seguridad y de la estabilidad del orden internacional", ha dicho Borrell cuando ha repetido que es importante pagar ahora el coste de las sanciones contra Putin por no tener que pagar un coste aún mayor en un futuro.