Tiroteo en Estados Unidos

Declaran culpable de homicidio a un hombre por el tiroteo en una escuela que cometió su hijo

James Crumbley y su esposa, condenada el mes pasado, son los primeros padres en Estados Unidos que se enfrentan a cargos de asesinato por un crimen múltiple de su hijo

James Crumbley, el padre del autor del tiroteo en un instituto, durante el juicio.
3 min

Un jurado de Estados Unidos ha declarado culpable de homicidio involuntario al padre de un adolescente que mató a tiros a cuatro compañeros de clase hace más de dos años, en una escuela del estado de Michigan. La sentencia llega una semana después de que su esposa y madre del joven también fuera condenada por los mismos cargos. Esto convierte a la pareja en los primeros padres declarados culpables directos de un asesinato múltiple cometido por su hijo en Estados Unidos.

La sentencia asegura que James y Jennifer Crumbley ignoraron las señales que advertían de que su hijo Ethan cometería una masacre. Muestra a la madre como una mujer desatada y negligente y acusa al padre de haber comprado el arma con que el joven cometió el tiroteo y de no haberla asegurado. "James Crumbley tuvo la oportunidad de evitar la muerte de estos cuatro estudiantes", afirmó el miércoles Karen McDonald, fiscal del condado de Oakland, en los argumentos finales. "Y no hizo nada".

El jurado también los consideró responsables de haber ignorado los problemas de salud mental de Ethan, que se habían puesto de manifiesto, por ejemplo, en un dibujo que hizo de una pistola y un hombre herido con frases como: "Los pensamientos no se detienen. Ayúdame. Mi vida no tiene sentido". "James Crumbley no es juzgado por lo que hizo su hijo", declaró la fiscal. "James Crumbley es juzgado por lo que hizo él y por lo que no hizo". Ahora el matrimonio se enfrenta a cargos penados con hasta 15 años de cárcel a cada uno.

El tiroteo se produjo el 30 de noviembre de 2021 en un instituto de la ciudad de Oxford, en Michigan. Murieron dos chicas y dos chicos entre catorce y diecisiete años que eran estudiantes del centro. Otros seis alumnos y un profesor resultaron heridos. Los fiscales del condado de Oakland acusaron a los padres del adolescente tres días después del incidente.

Uno de los puntos clave de los argumentos de la fiscalía ha sido que el arma que utilizó Ethan para el tiroteo había sido un regalo de Navidad adelantado de su padre, cuatro días antes del tiroteo. También consideraron que los adultos no "protegieron" la munición para que el menor no pudiera acceder a ella. De hecho, durante el juicio al autor del crimen, el joven declaró que la pistola que utilizó no estaba cerrada con llave cuando la puso en la mochila antes de ir al instituto.

Ethan Crumbley, que tenía 15 años en el momento de los hechos, fue declarado culpable por un cargo de terrorismo, cuatro de asesinato y otros 19 cargos en relación con la matanza. Actualmente cumple cadena perpetua.

Una sentencia innovadora

La sentencia establece un precedente en relación con la responsabilidad penal de los tiroteos masivos cometidos por menores de edad, demasiado habituales en Estados Unidos, y amplía el alcance de la culpabilidad en este tipo de casos. Los fiscales han utilizado una estrategia legal innovadora que logra responsabilizar a los padres personalmente del crimen por haber omitido la deteriorada salud mental de su hijo. Si bien no es la primera vez que los padres de un menor resultan culpables por acciones cometidas por sus hijos, con cargos como el de negligencia o tenencia de armas de fuego, sí es inédito que un padre sea considerado directamente culpable de los asesinatos en un tiroteo. El caso añade, pues, un argumento más en el debate sobre las limitaciones que deben existir para acceder a las armas en las que está inmersa la sociedad estadounidense.

stats