Joan Ramon Casas: "Si suprimes un pilar de un puente de estas dimensiones es imposible que aguante"
Catedrático de puentes de la Escuela de Caminos de la UPC
BarcelonaLas imágenes del derrumbe del puente de Francis Scott Key, en Baltimore, han dado este martes la vuelta al mundo por su espectacularidad. La construcción, metálica y de unos 2,6 kilómetros de largo, se ha derrumbado después de que un carguero de 300 metros de eslora chocara contra uno de sus pilares, algo sin precedentes desde que se inauguró 1977. Hablamos con Joan Ramon Casas, catedrático de puentes de la Escuela de Caminos de la Universidad Politécnica de Cataluña (UPC).
¿Qué sabemos de este puente de Baltimore y qué características lo definían?
— Se trata de un puente bastante conocido, con una estructura metálica en celos –barras de acero que se unen a determinados puntos de la construcción– muy típica de los puentes de dimensiones importantes, especialmente en Estados Unidos. Encontramos similares en varias ciudades por donde pasa el Misisipi.
¿Era previsible que hubiera un incidente como éste?
— El impacto de un barco es una situación que difícilmente ocurre, una acción muy extraña, ya que los puentes que cruzan estuarios o grandes ríos cuentan con un canal de navegación con un ancho suficiente. Lo entiendo como una acción accidental, como podría ser el caso de un terremoto o de un tren que descarrilara e impactara contra un pilar del puente, como ocurrió hace unos años en Alemania.
¿Cómo se explica que el puente se haya desmoronado?
— Si suprimes uno de los pilares de un puente como éste, tan grande y de tanto volumen, pierde uno de sus soportes importantes y cae. Si el puente hubiera tenido unas dimensiones más pequeñas y unos pilares más juntos quizás hubiera aguantado, pero en puentes de estas dimensiones es imposible.
¿Qué ha fallado para que el pilar cediera?
— Probablemente cuando se calcularon las defensas del pilar no se consideró la posibilidad del impacto de un barco tan grande. El puente se construyó en los años 70 y puede que entonces los barcos no fueran de tantas toneladas y se hiciera un cálculo con otras hipótesis.
¿Cómo se realiza este cálculo?
— En función de la masa de los barcos y la velocidad a la que circulen. La energía que transmiten debe ser absorbida por el puente en caso de impacto. Si el pilar no es suficiente, a veces se puede construir una protección, sea con una escollera o, de forma más definitiva, con otros pilares clavados en el fondo del río o incluso con una isla artificial.
¿La prevención pasa por actualizar estos cálculos y adaptar los puentes?
— Exacto. En los últimos años, por ejemplo, han tenido que levantarse puentes en Nueva York porque los barcos no pasaban. Se habían construido pensando en barcos de determinadas dimensiones, pero esto ha ido aumentando, tanto en sus dimensiones como en la masa que transportan. Son barcos más altos y anchos. El canal de Panamá también tuvo que agrandarse hace unos años por el mismo motivo.