Trump amenaza a España por el gasto militar: "Es terrible, haremos que paguen el doble"
El presidente de EEUU dice que duplicará los aranceles en Madrid como represalia a su negativa a alcanzar el 5% del PIB en Defensa
La HayaChoque frontal entre Estados Unidos y España. Pedro Sánchez ha sido el único líder que se ha mostrado abiertamente en contra de alcanzar el 5% del producto interior bruto (PIB) en gasto militar en la cumbre de la OTAN que se celebra en La Haya, y Donald Trump no ha dejado escapar la ocasión para verter toda la artillería contra la Moncloa. "España es terrible", ha dicho el presidente estadounidense. Y, a continuación, ha amenazado al gobierno español y ha asegurado que, de una u otra forma, le hará pagar la factura. "Haremos que paguen el doble", ha dicho el presidente de Estados Unidos, que controla de facto la Alianza Atlántica.
Luego, el magnate neoyorquino ha elogiado a España brevemente –"es un lugar fantástico, su gente es genial [...] y la economía española va muy bien"– para, a continuación, cargar con ella de nuevo sin miramientos. "Su economía podría quedar hecha añicos si ocurriera algo grave", ha advertido. Y ha asegurado que está "negociando un acuerdo comercial con España para que acabe pagando el doble". "Nos lo tendrán que devolver en comercio, porque yo no voy a permitir que esto ocurra", ha añadido.
Trump también ha dicho que negociará con el gobierno español de forma "personal y bilateral" sus relaciones comerciales para poner fin a lo que ha calificado de "injusto". Pero la realidad es que las competencias en comercio internacional son de la UE. El propio ministro de Economía español, Carlos Cuerpo, ha salido después a rechazar esta negociación bilateral que planteaba Trump, argumentando que España "está en una unión aduanera con 27 estados" y todas las negociaciones comerciales con Estados Unidos deben hacerse directamente con la Comisión Europea, que es "la que tiene las competencias para ello".
De hecho, Bruselas y Washington están en plenas negociaciones para poner fin a la guerra comercial que inició el propio presidente estadounidense. A estas alturas, ambas potencias se han dado una tregua parcial en el conflicto arancelario hasta el 9 de julio y esperan llegar a un entendimiento antes de ese plazo.
Ahora bien, por supuesto, la administración Trump puede encontrar la forma de castigar especialmente a la economía española a través de los acuerdos comerciales con la UE, y no sería la primera vez que pone en la diana concretamente uno de los estados miembros del bloque comunitario. En este sentido, puede priorizar incrementar los aranceles a productos que son originarios del Estado, tal y como en anteriores ocasiones ha puesto en la diana el champán o el vino francés. Sin embargo, preguntada por el ARA, la Comisión Europea responde que no tiene "ningún comentario a hacer" sobre las amenazas de la Casa Blanca, y menos aún mientras "las negociaciones están en marcha".
Desde Madrid, la vicepresidenta segunda del gobierno español, Yolanda Díaz, ha respondido al magnate neoyorquino que España "es soberana" y "no acepta amenazas de nadie". "No aumentaremos el gasto en defensa para contentar a Donald Trump. Nuestra prioridad es el gasto social y nos debemos al pueblo español", ha escrito Díaz a Bluesky. Fuentes del PP también advierten a Donald Trump de que no le "consentan las amenazas" y "aún menos si pretende utilizar a los productores" del Estado para "vengarse de la insolidaridad del presidente del gobierno" español. La formación conservadora también ha aprovechado el conflicto entre EEUU y España para cargar contra los socios de coalición de Sánchez y los ha tildado de "cómplices" de las "mentiras" del dirigente socialista en la OTAN.
Un Sánchez solitario
La posibilidad de una descarga de Trump contra Sánchez se planeó durante toda la cumbre de La Haya, pero no llegó hasta el final de la última rueda de prensa del presidente estadounidense. Hasta entonces, el magnate neoyorquino se había mostrado sorprendentemente contenido y se había limitado a calificar de " horas antes el presidente español había evitado el contacto con Trump en los momentos previos al inicio de la reunión por si acaso, y fuentes de la Moncloa aseguran que su intención en ningún caso era crear un "conflicto internacional" entre Washington y Madrid.
Aunque con un tono completamente distinto al habitual, Trump no ha sido el único líder de la OTAN que ha criticado públicamente el posicionamiento de la Moncloa, que se niega a alcanzar el 5% de gasto militar aunque haya firmado el acuerdo como todos los 32 aliados atlánticos. Así pues, Sánchez se ha convertido en el blanco de las críticas de buena parte de los dirigentes de la Alianza.
Entre otros, la también socialdemócrata Mette Frederiksen, primera ministra de Dinamarca, calificó la petición del gobierno español de "injusta"; el primer ministro sueco, el conservador Ulf Kristersson, se mostró contrario a "excepciones" dentro de la OTAN, y el ministro de Defensa polaco, Wladyslaw Kosiniak-Kamysz, dijo que "desviarse" del logro del 5% de gasto militar supondría ser un "mal ejemplo". "Espero que todo el mundo ponga de su parte, porque al fin y al cabo por eso somos una alianza", recordó el primer ministro griego, el democristiano Kyriakos Mitsotakis, quien aseguró que "no tendría sentido" que algunos socios fueran para "libre" y abogó por que los compromisos sean "vinculantes.
Este aislamiento también se ha hecho evidente en toda la escenificación de la cumbre. Se ha visto a Sánchez apartado ligeramente en la foto de familia y sin hablar con ninguno de sus homólogos en los momentos más destensados del encuentro, cuando normalmente los líderes aprovechan para intercambiar unas palabras. Así, en cuanto entró en la sala de la reunión, se fue a sentar directamente, solo.