Macron y Biden se unen contra Putin: "No se detendrá en Ucrania"
Ambos dirigentes exhiben unidad ante la agresión rusa en la visita de estado a Francia del presidente estadounidense
ParísFrancia ha recibido al presidente estadounidense con todos los honores. Joe Biden y el presidente de la República, Emmanuel Macron, junto con sus parejas, han desfilado por los Campos Elíseos –engalanados para la ocasión con banderitas de ambos países– acompañados de 140 caballos del ejército tras visitar la tumba del soldado desconocido en el Arco de Triunfo, que recuerda a los soldados muertos durante la Primera Guerra Mundial.
La primera visita de estado de Biden a Francia, que ha hecho este sábado después de participar en los actos de conmemoración del Desembarco de Normandía, se produce en un momento complicado en la escena internacional. Ambos dirigentes han escenificado su buena sintonía y han lanzado un mensaje de unidad ante los conflictos en Ucrania y en Palestina. La idea era demostrar que Francia y Estados Unidos están "sincronizados" en la agenda internacional y están "más cerca de lo que han estado nunca", en palabras del portavoz de la Casa Blanca, John Kirby.
"Tenemos una visión común sobre la guerra en Ucrania, que es la del respeto del derecho internacional y de la libertad de los pueblos a decidir sobre ellos mismos", ha dejado claro Macron en una breve comparecencia ante la prensa tras reunirse se con Biden en el Elíseo. "Estados Unidos está junto a sus aliados y de Francia", ha subrayado Biden. París y Washington comparten una posición común en las cuestiones esenciales en relación al conflicto, como la necesidad de seguir financiando la guerra y apoyando políticamente al país, pero no en todo lo que afecta al conflicto. El presidente de EE.UU. no se ha sumado a la idea de Francia de enviar instructores militares a Ucrania para formar soldados del país.
Soldados sobre el terreno
Macron anunció el viernes que varios países están en conversaciones para crear una coalición internacional para enviar a instructores de los países aliados sobre el terreno, que en ningún caso estarían en zonas de combate, pero Estados Unidos no se sumará a la iniciativa. Este sábado ambos presidentes se han limitado a hacer una declaración, pero no han aceptado preguntas de la prensa, posiblemente por no mostrar ninguna fisura en su mensaje de unidad. Rusia ya ha advertido de que considera la iniciativa una escalada en el conflicto y que considerará a los soldados internacionales un objetivo militar.
Biden ha reiterado que su apoyo a Ucrania es incuestionable y ha recordado que el presidente de Rusia amenaza a toda Europa. "Esto no se detendrá. Putin no se detendrá en Ucrania. Esto va mucho más allá, toda Europa estará amenazada. No lo vamos a permitir", ha asegurado. A su vez, el presidente de la República ha agradecido a Joe Biden "la lealtad de un socio que ama y respeta a los europeos". "La seguridad y la estabilidad de nuestra Europa están en juego", ha insistido.
Visita simbólica
La visita de Biden tiene una gran carga simbólica. El presidente estadounidense ha visitado Francia mientras millones de europeos votan en unas elecciones que muy probablemente supondrán un crecimiento de la extrema derecha en Europa, y especialmente en Francia, y pocos meses antes de las elecciones presidenciales estadounidenses, que podrían volver a situar a Donald Trump en la Casa Blanca. París, y también Bruselas, temen el regreso de Trump porque su llegada al poder pondría en juego el apoyo inequívoco de EE.UU. a Ucrania. Por eso esta semana, en Francia, Biden ha repetido en tres ocasiones que Washington –si él se mantiene en la Casa Blanca, se entiende– "no dará la espalda" ni a sus aliados europeos ni en Ucrania ante Rusia.
Emmanuel Macron y Joe Biden también han mostrado su coordinación en el conflicto en Gaza. Ambos presidentes se han felicitado por la liberación de los cuatro rehenes israelíes, han vuelto a pedir a Israel un alto el fuego y han llamado a encontrar una solución política al conflicto. "La situación en Rafah y el número de víctimas es intolerable", ha destacado Macron. El presidente de Estados Unidos ha asegurado que Washington no dejará de trabajar "hasta que todos los rehenes haya regresado a su casa".