Infraestructuras

El túnel submarino más largo del mundo que unirá Europa

El Fehmarn Belt, que tendrá carretera y vías de tren, conectará Dinamarca y Alemania en pocos minutos

Un ferry Scandlines pasa por el lugar de construcción del nuevo túnel de enlace fijo de Fehmarn Belt
Marta Casagolda
31/03/2023
3 min

CopenhaguenEn 1644 Dinamarca y Noruega estaban en guerra con Suecia. El enfrentamiento decisivo fue una batalla naval en el mar Báltico, en el estrecho de Fehmarn, al lado de Alemania. Los suecos, con la ayuda de la flota de los Países Bajos, ganaron después de que Dinamarca perdiera doce de sus barcos: diez fueron capturados y dos se hundieron. Trescientos años después, los restos de aquellas fragatas se han localizado bajo el Báltico durante la construcción de una de las infraestructuras más grandes de Europa. Se trata del Fehmarn Belt, un túnel sumergido que tendrá carretera y vías de tren y enlazará la isla alemana de Fehmarn con la danesa de Lolland. Una vez acabado, en 2029, será el túnel combinado más largo del mundo y conectará, de manera más rápida, los países nórdicos con el resto de Europa.

El túnel que unirá Alemania y Dinamarca

DINAMARCA

Rødby

mar Bàltic

Fehmarn

ALEMANYA

20 km

DINAMARCA

Rødby

mar Bàltic

Fehmarn

ALEMANYA

20 km

DINAMARCA

Rødby

mar Bàltic

Fehmarn

ALEMANYA

20 km

Los conductores que hoy en día quieren ir de Dinamarca a Alemania lo tienen que hacer o bien por la península de Jutlandia o bien por una ruta más corta en kilómetros, pero que obliga a subir el vehículo a un ferry. Estos barcos salen desde Rodbyhavn, donde actualmente se puede ver que el paisaje está cambiando por el polvo de las obras. La infraestructura se ubicará a unos 40 metros de profundidad de las aguas del Báltico y tendrá 18 kilómetros de largo.

La zona donde se hacen las obras está delimitada por seguridad, pero desde un mirador elevado, construido por la empresa danesa encargada del proyecto, Femern, se puede seguir la evolución de los trabajos. Los jubilados y curiosos se sientan, los días en los que el viento lo permite, para contemplar la entrada y salida de camiones. Cada semana se reciben unas 80.000 toneladas de cemento, acero y piedra que se almacenan en una gran fábrica, del tamaño de 200 campos de fútbol.

Lo que es curioso es que de esta fábrica saldrá el túnel ya construido por bloques. Los ingenieros destacan, como característica diferencial de este inmenso proyecto, que la mayor parte de los trabajos de construcción se están haciendo sobre tierra y no en el agua. A diferencia del túnel del canal de la Mancha, que enlaza el Reino Unido con Francia, en el mar Báltico no se está perforando el terreno. 

El Fehmarn Belt se está construyendo por secciones con piezas de hormigón de unos 217 metros de largo. Tendrá dos largos tubos de autopista de doble carril, otro tubo de acceso de servicio, y dos largos tubos más por donde circularán los trenes. Las piezas de hormigón, que pesarán unas 73.500 toneladas, se trasladarán con grúas dentro de unas grandes barcazas y se irán encajando dentro del agua. A la vez se está preparando el terreno para que sea estable y varios barcos, que llevan incorporadas las excavadoras más grandes del mundo, están drenando la arena y la tierra del fondo marino.

El terreno se ha analizado al milímetro para asegurar la sedimentación y, a la vez, los arqueólogos han explorado un área de más de 3 millones de metros cuadrados. Además de las fragatas danesas hundidas en la batalla de Fehmarn, también se han encontrado balas de cañones y enseres de hace miles de años. Todo esto se puede ver en una exposición que la empresa constructora del túnel ha habilitado en el puerto de Rodbyhavn.

Viajes más sostenibles

Cuando se planteó el proyecto, diferentes entidades ecologistas danesas se mostraron contrarias a su construcción. Pero acabaron considerando que, a largo plazo, el túnel puede mejorar la movilidad para hacerla más sostenible y han pasado de pedir que se cancelara el proyecto a supervisar el impacto ambiental de la construcción. Lo hicieron con la eliminación de un lago situado en la entrada de la boca del túnel y la creación de otro lago artificial, unos kilómetros más allá, para preservar la fauna y la flora de la zona.

A diferencia de Dinamarca, en Alemania el proyecto sufrió muchas trabas por las múltiples denuncias impuestas por asociaciones para preservar la naturaleza. Finalmente, en 2020, el Tribunal Supremo alemán dio luz verde al proyecto que permitió el inicio de los trabajos de construcción.

Una vez acabado, el túnel se podrá atravesar en 10 minutos si se va en coche y en siete minutos si el trayecto se hace en tren, y los tiempos de viaje entre Dinamarca y Alemania se reducirán. Por ejemplo, para ir de Copenhague a Hamburgo se tardará dos horas y media en tren, la mitad que hasta ahora, y por carretera el trayecto durará una hora menos. Se prevé que el túnel aumente el transporte por tren, recorte los viajes en avión y, en consecuencia, lleve a una reducción de las emisiones de CO₂. Dinamarca espera que en el punto geográfico donde hace más de 300 años perdió una batalla ahora gane un espacio de conexión más rápido y sostenible con el resto de Europa.

stats