El gobierno de Tonga dice que la erupción y el tsunami han causado "un desastre sin precedentes"
La ayuda humanitaria se atrasa por la destrucción de las costas y la ceniza en la atmósfera
BarcelonaEl gobierno de la isla de Tonga admite que el tsunami causado por la erupción volcánica en este archipiélago del Pacífico Sur ha causado "un desastre sin precedentes". En el primer comunicado desde la erupción del sábado, que dejó las islas incomunicadas, el ejecutivo confirma la muerte de al menos tres personas en el tsunami, que golpeó con oleadas de hasta 15 metros varias islas. Las tres primeras víctimas de la erupción del Hunga Tonga Hunga Ha'apai identificadas son una mujer británica, una mujer de 65 años de la isla de Mango y un hombre de 49 de la isla de Nomuka. Según el ejecutivo, todas las casas de la isla de Mango han desaparecido y en la de Fonoifua solo han quedado dos edificaciones en pie.
![Imágenes aéreas antes y después de la erupción del volcán en Tonga.](data:image/svg+xml,%3Csvg xmlns="http://www.w3.org/2000/svg" viewBox="0 0 3040 4128"%3E%3C/svg%3E)
La llegada de ayuda humanitaria se complica por la destrucción de las cosas y la densa capa de ceniza que cubre el territorio, formado por 169 islas, donde viven unas 105.000 personas. El suministro de agua ha quedado fuertemente afectado y los expertos alertan que la contaminación causada por la ceniza volcánica puede afectar el acceso a los alimentos. Los barcos de la marina de Nueva Zelanda cargados de ayuda de emergencia no llegarán a la zona hasta el viernes. Australia prepara también el envío de 250.000 litros de agua potable y una planta de desalinización.
![Una de las primeras imágenes de la destrucción en Tonga.](data:image/svg+xml,%3Csvg xmlns="http://www.w3.org/2000/svg" viewBox="0 0 16 9"%3E%3C/svg%3E)
Uno de los temores de la población de la isla es que el personal humanitario pueda llevar el covid-19, y es que hasta ahora solo se ha comunicado un caso en el archipiélago, el octubre pasado. El gobierno exige a todos los visitantes del extranjero que lleguen al país una cuarentena de 21 días y solo un 60% de la población ha recibido dos dosis de la vacuna. Tanto Australia como Nueva Zelanda aseguran que se puede transportar ayuda con seguridad, pero los habitantes de la isla no han olvidado la historia de las terribles epidemias de sarampión, disentería y gripe importadas por los colonizadores europeos.
