Hamás entrega los cadáveres de cuatro rehenes, incluidas dos criaturas, mientras se negocia el futuro del alto el fuego

El frágil acuerdo continuará el sábado con una nueva liberación de seis israelíes a cambio de 500 prisioneros palestinos

Entrega de los rehenes fallecidos en Gaza, en una captura de vídeo.
20/02/2025
3 min
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BarcelonaHamás ha entregado este jueves a Cruz Roja los cuerpos de cuatro rehenes israelíes secuestrados el 7 de octubre del 2023, mientras se negocia la segunda fase del frágil alto el fuego en Gaza. Se trata de Shiri Bibas y sus dos hijos, Kifr y Ariel, que cuando fueron secuestrados tenían nueve meses y 4 años. El cuarto es Oded Lifshitz, un hombre de 83 años, el pacifista y marido de Yocheved, que desde que fue liberada el pasado año ha sido una de las voces más prominentes para pedir un alto el fuego. Hamás dijo en noviembre del pasado año que la madre y los niños habían muerto en un bombardeo israelí, aunque Tel Aviv no lo había confirmado. La familia era un símbolo del trauma israelí en el ataque palestino y también del precio que tenía para los rehenes la política del gobierno Netanyahu de rechazar un alto al fuego para posibilitar su liberación.

La entrega se realizó en el sur de Gaza, en Khan Younis, que el ejército israelí había allanado para convertirlo en el centro de operaciones de la invasión del sur de Gaza, con un fuerte despliegue de milicianos armados de Hamás y Yihad Islámica. Se trata del primer regreso de rehenes fallecidos, y no se espera que Israel confirme sus identidades hasta que se hayan realizado las pruebas de ADN. Los féretros han sido presentados en un escenario con una pancarta en la que se ve una caricatura de Netanyahu como si fuera un vampiro ensangrentado con las imágenes de los fallecidos debajo.

La familia fue secuestrada en el kibutz de Nir Oz, uno de los que va más víctimas sufrió en el ataque paletín del 7 de octubre. El padre también fue secuestrado y fue liberado en los intercambios de rehenes por prisioneros palestinos de ese mes. La jornada es de alto voltaje político en Israel. El politólogo israelí Akiva Eldar recuerda en declaraciones a Al Jazira que "estas criaturas se han convertido en un símbolo de la estupidez del gobierno israelí, de su falta de respeto por los valores judíos: la cuestión es cómo detenemos el sacrificio de más criaturas inocentes en esta guerra". Eldar denuncia que "Netanyahu tiene otras prioridades antes que salvar a los rehenes".

El alto el fuego es muy frágil y debe continuar el sábado con la liberación de otros seis rehenes a cambio de 500 prisioneros palestinos, la mayoría mujeres y criaturas detenidos por el ejército israelí en Gaza en la actual ofensiva. Hamás adelantó la liberación de los cuerpos este jueves y la aprovechó para hacer otra demostración de fuerza, mientras mantiene su compromiso con el alto el fuego. Hasta ahora han sido liberados 19 rehenes de los 33 previstos, pero la clave es qué ocurrirá el 1 de marzo, cuando debería entrar en vigor la segunda fase del alto el fuego, que prevé la retirada total de las tropas israelíes de Gaza y un alto el fuego permanente. Hamás se ha ofrecido a liberar de golpe a los 60 rehenes que deberían ser devueltos en la segunda fase, si Israel acepta la tregua permanente. Los ministros de ultraderecha de Netanyahu le presionan para abandonar el acuerdo, aunque el alto el fuego está respaldado por la mayoría de la población. Pero el presidente estadounidense Donald Trump defiende la expulsión de los palestinos de Gaza, una limpieza étnica que dinamita la posibilidad de un acuerdo. El 27 de febrero se ha convocado una cumbre de la Liga Árabe en El Cairo donde se supone que los países árabes presentarán su plan en respuesta a la Casa blanca.

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