¿Cómo tomaron el poder los rebeldes sirios?
La ofensiva ha hecho caer, en menos de dos semanas, la dictadura Al Asad, que llevaba más de 50 años gobernando el país
BarcelonaLa ofensiva de los rebeldes sirios ha derribado, en menos de dos semanas, a la dictadura Al Asad, que llevaba más de 50 años gobernando el país. Encabezados por la milicia Hayat Tahrir al-Sham (Organismo de Liberación del Levante, en árabe), los insurgentes ganaron Alepo el pasado viernes y obligaron a las fuerzas del régimen a retirarse de la segunda ciudad del país. Desde entonces, conquistaron territorio a una velocidad impensable hasta que el sábado derribaron a Homs y entraron en Damasco, sin encontrar prácticamente resistencia de las fuerzas del régimen. Las horas siguientes pasarían a la historia: la cúpula de las fuerzas armadas notificaba a sus oficiales que el gobierno de Al Asad había caído y el presidente abandonaba la capital y pedía refugio en Rusia.
El mapa, antes y después de la ofensiva
La guerra de Siria había dejado al país dividido. Las fuerzas del ejército sirio habían ido consolidando su dominio del centro y el sur del país, con el centro operativo en la capital, Damasco. Los rebeldes, en cambio, habían quedado arrinconados en la zona de Idlib, que es la ciudad desde la que han lanzado la última incursión. En pocos días, han ganado las principales ciudades del país, hasta obligar al régimen a retirarse. Las fuerzas democráticas de Siria, mayoritariamente formadas por milicias kurdas, están sobre todo presentes en el noreste de Siria, pero también han ganado una barriga de territorio en el sur de Raqqa. El Estado Islámico, que hace tiempo llegó a dominar a un tercio del país, ha ido perdiendo terreno, y ya sólo controla algunas pequeñas manchas repartidas por el centro. Por último, las milicias que reciben el apoyo de Turquía, aunque también han protagonizado enfrentamientos con las milicias kurdas, siguen controlando una franja de territorio similar en el norte del país.
Detalle de los avances de los rebeldes
El 27 de noviembre, el mismo día que entraba en vigor el alto el fuego entre Israel y Líbano, las fuerzas de la oposición siria, lideradas por la milicia HTS, lanzaron una ofensiva desde su base de Idlib, al noroeste de Siria. En sólo tres días tomaron el control de Alepo, la segunda ciudad del país, y obligaron a las tropas del ejército del gobierno sirio a retirarse de la ciudad. Siguieron ganando territorio hacia el este y hacia el sur siguiendo el M5, que es la principal autopista del país, que une Alepo con Damasco.
El jueves tomaron el control de Hama y, sólo dos días más tarde, tomaron Homs, la principal ciudad del centro del país. Damasco cayó esa noche, del 7 al 8 de diciembre, porque confluyeron los milicianos procedentes de Homs con un segundo grupo de rebeldes que subían de Deraa, una ciudad del sur del país, conquistada apenas un día antes.
Evolución de la guerra
Las protestas contra Al Asad en el marco de la Primavera Árabe estallaron en marzo del 2011, y la violencia con la que fueron reprimidas fue el detonante del conflicto. En la primera etapa, los rebeldes, que incluían facciones extremistas islamistas y moderados, lograron ocupar la mayor parte del noroeste del país. En el 2014, vino el ascenso del Estado Islámico –que llegó a controlar un tercio del país– y en el 2015 Rusia decidió apoyar militar a Asad.
Pese a los éxitos iniciales de los rebeldes, las fuerzas pro-Assad –con la ayuda de Hezbollah– consiguieron recuperar territorio gracias a una fuerte campaña de bombardeos sobre Alepo, a una gran ofensiva en el 2017 contra el Estado Islámico ya una serie de victorias en enfrentamientos en el noreste del país durante 2019 y 2020. En este punto, las posiciones quedaron estancadas, hasta que se han reactivado los combates en noviembre.
La guerra, en cifras
muertes
Desde el inicio del conflicto, en 2011
millones de desplazados
6,2 millones de los cuales se han ido del país
nuevos desplazados este noviembre
Desde el inicio del conflicto, en 2011, más de 606.000 personas han muerto en Siria por culpa de la guerra, según el Observatorio Sirio de Derechos Humanos, en una de las peores masacres del siglo XXI. Muchos han sido civiles. El número de sirios que han tenido que dejar su casa sube hasta los 13,4 millones, de los que 6,2 se han marchado fuera del país. Desde la escalada del conflicto en noviembre, han muerto al menos 727 personas, entre ellas más de 100 civiles, según el Observatorio Sirio de Derechos Humanos. Y ya existen al menos 48.500 nuevos desplazados.