¿Por qué los deportistas no dicen la verdad sobre Qatar?
El jugador del Real Madrid y de la selección española Joselu ofrece una entrevista en El Mundo donde explica su decisión de dejar el club blanco para irse a un equipo de Qatar, en concreto al Al Gharafa, donde también irá su compañero Nacho. El titular es ya una autojustificación vergonzosa: "No solo pienso en el dinero". Y se pasa toda la entrevista argumentando que él es un jugador competitivo y que la liga de Qatar es "muy competitiva". Y al final añade: "Sé que voy a un país donde la calidad de vida para mi familia y mis hijos es buenísima".
No pasa nada. Joselu tiene 34 años, ha vivido una temporada de ensueño en el Real Madrid, y ahora, ante las llegadas de Mbappé y Endrick, decide que es la hora de hacer caja antes de retirarse, como tantos otros deportistas de élite: Cristiano Ronaldo, Benzema o Guardiola y Xavi en su día. En Qatar le ofrecen tres años de contrato y un sueldo muy superior al que le ofrecía el Real Madrid para quedarse. Él y su familia vivirán muy bien, rodeados de lujo, en un país que es una dictadura, donde las mujeres no tienen los mismos derechos que hombres y trabajadores no tienen derechos laborales ni nada parecido a ellos. Eso sí, los qataríes de origen y los occidentales que compran con sus petrodólares tienen una gran calidad de vida.
Curiosamente, un compañero de vestuario de Joselu, el alemán Toni Kroos, dijo que nunca iría a jugar a un país de estos, y se ha retirado al Real Madrid. Sin embargo, Kroos es una excepción. No hay muchos futbolistas con conciencia política y sean consecuentes. Pero al menos agradeceríamos que dijeran la verdad y pudiéramos leer este titular: "Voy porque me pagan un montón de millones, ¿qué pasa?".