Refrescos en el chiringuito a cambio de recoger colillas: "Quien más participa son los niños"

BarcelonaEntre la arena de la playa, además de conchas y piedras, muchas veces existen otros elementos que no son tan agradables de encontrar. Normalmente, basura que se acumula de las personas que disfrutan de la playa y que, en cambio, la dejan más sucia de lo que la encuentran. Por ejemplo, con cigarrillos. Hace unos años que uno de los chiringuitos que ocupan la playa de Castelldefels impulsa una iniciativa para reducir la acumulación de colillas en la arena. "Los niños son las personas que más colaboran, les hace mucha gracia este proyecto", explica al ARA una de las camareras que trabaja.

Las colillas son uno de los residuos que más contaminan el fondo marino. Cada año se tiran más de 4,5 millones al mundo, y de éstas, cientos de millones terminan bajo el agua y provocan efectos muy nocivos para el medio ambiente. Por este motivo el Grupo Tibu-Ron apuesta por premiar la recogida de colillas: por cada vaso lleno de colillas de tabaco, regalan un refresco o una cerveza.

Según los trabajadores, la propuesta tiene una buena aceptación entre todos los bañistas, pero destacan que los niños son los que más activamente participan. "Nos traen bolsas llenas y así también toman conciencia de la importancia de cuidar nuestras playas", aseguran los impulsores de la iniciativa. "La arena no la limpian hasta la noche y durante el día se ensucia mucho", añaden. Además, destacan que no hay límite de uso y que "cuantos más vasos se llenen de colillas, mejor".

Playas antitabaco

En total, sólo ocho municipios del litoral marítimo catalán han ido impulsando medidas orientadas a convertir sus playas en espacios libres de humo y de colillas de cigarrillo. Sin embargo, cada vez hay más que directamente apuestan por prohibir fumar en la arena o en el agua. Uno de los que se han sumado recientemente a esta iniciativa es Lloret de Mar, que este verano ha limitado el tabaco y ya no lo permite en sus playas.

Desde hace dos veranos tampoco se puede fumar o utilizar cualquier otro dispositivo que libere nicotina al litoral barcelonés. La única excepción de esta norma son las terrazas de los chiringuitos, donde sí se puede seguir fumando. En cuanto a las sanciones, rondan los 30 euros de multa (el mismo importe con el que se sanciona a quien fuma en los parques infantiles), si bien sólo se aplican en casos de incumplimientos reiterados.