Cataluña, un escenario de película

Una de las últimas tendencias a la hora de planificar escapadas y viajes es aprovechar los desplazamientos para descubrir lugares en los que se han rodado películas o series míticas. Esta corriente empezó con los fans, pero se está haciendo más popular y cada vez hay más personas que utilizan este hilo argumental como excusa para descubrir nuevos parajes.

En verano de 2022, el ARA publicó, con el apoyo de la Agencia Catalana del Patrimonio Cultural,Escenarios de película, una serie de artículos en los que el periodista Daniel Romaní emprendía un viaje por todo el territorio catalán para dar a conocer los principales escenarios donde se han rodado películas y series de todas las épocas, tanto de producción catalana como de otras países. Girona (Juego de truenos), Manresa (Plácido), Tossa (Pandora y el holandés errante), Terraza (La telaraña), Vilafranca del Penedès (Habitaciones cerradas), Cervera (Vida privada) y, por supuesto, Barcelona (El reportero) son algunos de los numerosos sitios que visitó, muchos de los cuales han quedado asociados para siempre a obras de la pantalla. Un libro (Cataluña, plató de cine, Viena Ediciones) recoge ahora los textos, que mantienen toda la vigencia del mundo.

“El lector encontrará algunos elementos nuevos en relación al contenido que se publicó en el diario, sobre todo más fotografías. Hay fotogramas, fotos del rodaje y en especial de los elementos del patrimonio cultural... También hay bastantes carteles de las películas. He incorporado dos capítulos nuevos que no aparecieron en el diario y que son algo más largos: 'Suro', una película rodada en Darnius (Alt Empordà) sobre la tensión de una pareja en un lugar idílico, y 'Modelo 77', una buena película que muestra muy bien la cárcel Modelo de Barcelona por dentro”, avanza Romero.

El autor del libro da voz a los participantes de los rodajes y pone especial énfasis en los elementos de patrimonio cultural -y en algunos casos también natural- que vale la pena visitar de cada lugar. Numerosas imágenes de estos espacios culturales y naturales, del propio filme y del rodaje complementan unos textos llenos de curiosidades que invitan a ver -o volver a ver- todas las películas. “He estado en todos los escenarios y he visto todas las películas. También las miniseries! Esto significa tiempo, pero para mí era esencial para poder realizar un buen trabajo. En el libro cuento la visita que hago, digo lo que me gusta y aporto curiosidades... Siempre he ido acompañado de alguien, sea un actor, un director o un extra”, dice el periodista.

“Tenemos un extraordinario patrimonio cultural y natural en Cataluña, y muy variado. Y, por supuesto, es un magnífico escenario para los rodajes. ¡Es que los decorados ya están hechos! El libro invita a conocer las casas señoriales, los castells, las iglesias, las catedrales o los núcleos históricos en los que se han rodado escenas de películas y series de toda Cataluña, tanto catalanas como de otros lugares”, explica.

“La Europa posterior a la Segunda Guerra Mundial se hallaba en una situación de pobreza. Países mediterráneos como Grecia, Italia o España pusieron todas las facilidades para que los americanos pudieran rodar allí estos filmes fuera de su país, llamados 'run away productions'. Para el régimen español, además, acoger a estrellas de Hollywood suponía limpiar un poco su imagen”, opina. La película 'De repente, el último verano', rodada en Begur, junto a Liz Taylor, forma parte de esta política. Su rodaje tuvo un notable impacto económico en la zona en los años 50.

El libro está escrito con rigor y contiene muchas anécdotas y curiosidades. “Algunos rodajes dejaron muy buen recuerdo en la población. Este año hace precisamente 60 años del rodaje deCampanadas a medianocheen Cardona. Muchos cardoninos, desde camareros hasta peluqueras, trabajaron para el rodaje, y tienen buen recuerdo. Los mayores recuerdan que su director, guionista y actor, Orson Welles, iba con un vaso de whisky en la mano y una capa negra repartiendo caramelos a los niños. Durante muchos años, en la representación de los Pastorets de Cardona se utilizaban decorados y algunos elementos utilizados en el rodaje”, detalla Romaní.

Un gran plató audiovisual

“Catalunya lleva años siendo un gran plató audiovisual, tanto para ficciones locales como internacionales. De estas últimas tenemos ejemplos históricos y míticos, como el rodaje de 'Pandora y el holandés errante' en Tossa de Mar —con culebrón sentimental entre Ava Gardner y Frank Sinatra en medio—, y también más recientes, como 'La casa del dragón', en los Jardines de Santa Clotilde de Lloret de Mar”, analiza Alejandra Palés, periodista de la sección de Media del ARA.

“Catalunya es un escenario cinematográfico magnífico. Y a través del rodaje de películas y series en nuestro territorio capturamos también la esencia de nuestra tierra y celebramos la contribución del cine a nuestra identidad”, celebra Judith Colell, presidenta de la Academia del Cinema Català.

Cataluña, plató de cinerevela algunos casos en los que el escenario del rodaje no se corresponde al de la novela que ha dado origen a la película. “Es el caso deCompañeros, proceso en Cataluña, que no pudo rodarse en el castillo de Montjuïc, donde fue ejecutado el expresidente. Las autoridades militares no dieron permiso y se rodó en el castillo de Hostalric. Es curioso queSoledadse filmara en el Alt Urgell, a los pies del Cadí, y no en la ermita de Santa Caterina (en el Montgrí), donde está ambientada la novela de Víctor Català que es la base de la película. Hay muchos más casos, en el libro”, resume Romaní.